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ASUNCIÓN.- Mientras aumentan los rumores de que corrió plata entre algunas bancadas de Diputados para evitar la interpelación de Julio Fernández, director de Aduanas, otros observadores aseguran que fue el presidente Mario Abdo Benítez el que ordenó a su bloque de la cámara que eviten poner en el brete al funcionario por el caso de la denuncia que había presentado en contra del senador colorado Martín Arévalo, por presunto tráfico de influencias.
El tema estaba previsto en una sesión extra que debía interrumpir la ordinaria de ayer, cerca del mediodía, pero no pudo realizarse por falta de quórum ante el abandono de la bancada oficialista, por lo que inmediatamente se habló de que Fernández había “aceitado” a varios legisladores, lo que el funcionario respondió con burlas.
El director de Aduanas afirmó que estaba preparado para responder con solvencia los cuestionamientos de los diputados, y que el mismo presidente Abdo Benítez había expresado su deseo de que se presente a la interpelación. “Podíamos responder con solvencia; creo que no fue ningún acuerdo político”, aseguró, aunque no convenció a quienes insisten en que fue el jefe de Estado quien habría dado la instrucción de dejar sin quórum la sesión a su bloque en la cámara.
Aunque algunos dicen que se fijará una nueva fecha de convocatoria, otros muchos aseguran que esto ya cayó en agua de borrajas y el tema irá al opa reí.
