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ASUNCIÓN.- Romulo Filipini, el liquidador de la asegurada Asepasa, encargada del seguro del Congreso, llegó hasta el lugar para observar los daños en el Congreso. En tanto que Nino Martínez, administrador del Congreso, comentó que el edificio cuenta con un seguro de 20 millones de dólares.
El edificio no cuenta con peligro de derrumbes, aunque en la parte frontal es donde se registraron mayores daños a causa del fuego, de acuerdo a los uniformados.
El Ministerio Público está evaluando la estructura a través de un perito para que pueda ser habilitado nuevamente. Varias oficinas de senadores y diputados quedaron destrozadas. Según los datos hay secciones como la planta baja y el primer piso que quedaron con un daño casi absoluto.
Mientras que en el segundo piso no se registraron muchos daños, aunque cuenta con hollín luego del fuego en la parte frontal del edificio.
En tanto que la sala de sesiones no llegó el fuego, allí se quebraron varios equipos informáticos.
Los trabajadores ingresaron uno a uno a retirar sus enseres bajo estrictos controles de seguridad por parte de agentes policiales. Por su parte, el titular del Congreso, Robert Acevedo, suspendió las actividades laborales de los funcionarios permanentes, contratados y comisionados que realizan tareas dentro de la Cámara de Senadores a partir de ayer.
