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Por donde se la mire, esta ocupación del Cuartel de la Victoria filtra fines electoralistas. Contra la Ley que regula la construcción de viviendas sociales, el Frente Guasu pretende determinar qué se expropia y para quiénes. Abogar por un “parque ecológico”, pero comenzaron a destruir 40 hectáreas de 76 de bosques. Tal como avanza la ocupación se va demostrando que es un plan político y electoral del FG apoyado por los radicales auténticos. Los luguistas primero se lavaron las manos sobre la ocupación, pero reivindican la actitud de los invasores haciéndose cargo del proyecto de expropiación. Senavitat y Asistencia Social no intervendrán sobre la base de la violencia. La oposición sostiene que el gobierno debe resolverlo y los colorados aseguran que “es una falta de respeto al sitio” y “se está buscando un nuevo Rodrigo Quintana”.
ASUNCIÓN.- La invasión violenta del predio del Cuartel de la Victoria se desarrolla en medio de contradicciones de la alta dirigencia de la alianza opositora. Mientras el Frente Guasu intenta lavarse las manos, pero a la vez reivindica y presenta un proyecto de expropiación del mismo lote, el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) lo rechaza. En tanto los colorados aseguran que ambas fuerzas, liberales y luguistas están en el mismo plan buscando instalar un nuevo 31M.
El Frente Guasu desarrolla un plan con fuerte tinte electoralista en la que pretende determinar qué se expropia y para quiénes; asuntos que corresponden a otra organización y del Estado. Dice abogar por un “parque ecológico”, destruyendo 40ha de 76 ha de bosque.
Carlos Filizzola, senador del FG, reivindicó el proyecto de desafectación de una parte del Cuartel de la Victoria, pero negó cualquier tipo de vinculación política con los responsables de la ocupación.
“No hay una cuestión política con ellos, a parte, nosotros no tenemos nada que ver con la ocupación, es una decisión que toma la gente que hace la ocupación, nuestro proyecto de desafectación se basa en el déficit habitacional”, adujo.
El congresista desconoce las políticas habitacionales del gobierno y pretende instalar al FG como organización responsable de estas políticas, determinando qué expropiar y a quién conceder las tierras. Expropiaciones de tierras públicas o privadas deben ser a favor del Estado paraguayo y éste determinar quiénes se ajustan a los requisitos para asentarse en ellas.
Hace dos semanas una supuesta coordinadora sin vivienda invadió el predio mencionado y los luguistas no se hicieron esperar para el apoyo político correspondiente. Esta organización política presentó el proyecto que desafecta de un sector del cuartel dejar el resto a la Secretaría de Acción Social (SAS) para construcción de un barrio, cuando es la Senavitat la responsable de esta acción. Soledad Núñez, ministra de la vivienda, aseguró que intervendrá solo hasta que abandonen el predio.
Filizzola asegura que esta iniciativa fue producto de la audiencia pública; sin embargo, ni Senavitat ni la SAS tiene alguna referencia de tan audiencia.
“La desafectación es una medida legal, es una medida que hay que tomar en tiempos de crisis”, dijo finalmente Filizzola.
REPUDIO MILITAR
Militares de la reserva de la Fuerzas Armadas de la Nación se sienten indignados por la actitud de los grupos que ocuparon el Cuartel de la Victoria y de la actitud política asumida por el partido luguista Frente Guasu. Cristian David Sanabria, suboficial de reserva de la Fuerza Aérea, manifestó durante una marcha contra los ocupantes su repudio a la invasión y propuso que “es conveniente agotar todas las instancias jurídicas para desalojar a los ocupantes ilegales del predio”. Entiende que los ocupantes “están siendo manipulados por los líderes de la Coordinadora por la Vivienda Digna, quienes buscan un rédito político de la situación”.
Este movimiento tiene una directa vinculación con el Frente Guasu, frente político que formó la alianza opositora cuyos candidatos son el liberal Efraín Alegre y el luguista Leo Rubín.
Aseguró que los invasores son manipulados por estos sectores políticos “y no estoy a favor del uso de la fuerza” y asegura que “no son responsables de lo que hacen porque están siendo manipulados por los líderes de la Coordinadora por la Vivienda Digna, quienes buscan un rédito político de la situación”.
El militar dijo que el comportamiento de los instigadores revela que la ocupación estuvo planificada y organizada con anticipación y con fuerte apoyo de sectores políticos a quienes cuestiona “porque intentan sacar provecho de la necesidad de los sintechos, teniendo en cuenta la proximidad de las elecciones generales”, aseguró.
