José Ortiz, empresario.
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Cuestionan impuesto al tabaco por inocuo e impracticable

El presidente de Tabacalera del Este Sociedad Anónima (TABESA), José Ortiz, alertó sobre la intención de los senadores del Frente Guasu (FG) de atentar contra la industria tabacalera paraguaya y de esa manera arriesgar miles de empleos de compatriotas. Se mostró en total desacuerdo con un aumento del impuesto al tabaco del 16% al 30%. Aclaró que el ajuste que pretende aplicarse en el Senado no es solo del 14%, sino de un 80% en relación al mismo impuesto. Afirmó que una excesiva carga generará el florecimiento del “mercado negro” y la migración de las industrias a otros países.

ASUNCIÓN.- Los senadores del Frente Guasu insisten en la aprobación de una ley impracticable, que busca destruir la industria tabacalera paraguaya y con  ella, miles de empleos de compatriotas.

El empresario José Ortiz afirmó que el tabaco ya está afectado por otras imposiciones como el IVA, el selectivo al consumo y el impuesto a la renta. Consideró que lo correcto es que el reajuste impositivo se haga de manera gradual, sin superar la franja del 10% que se pretende incrementar.

Por otro lado, el también presidente de la Asociación de Tabacaleros del Paraguay salió al paso de las acusaciones que vinculan el negocio del tabaco con el contrabando. “Nosotros no podemos hablar de contrabando cuando es un producto nacional que se vende en territorio paraguayo y que paga todos los impuestos, si ese contrabando existe, existe en otras instancias ya que están totalmente fuera de control de la industria”, sostuvo.

Ortiz explicó que Paraguay se caracteriza por una política de Estado, de tener el impuesto moderado y de ser un país de turismo comercial, lo que ocurre en Salto del Guairá, Ciudad del Este y Encarnación. Son ciudades turísticas y sus atractivos son los precios accesibles, además toda la ciudadanía nacional se ve beneficiada porque pueden acceder a los productos al mismo precio.

Indicó que también hay que reconocer que todas las ciudades mencionadas viven de las compras realizadas desde el exterior, y uno de los productos es el cigarrillo, pero es uno más de los cientos que están dentro del paquete turístico, y la mayoría no son de procedencia nacional y no generan mano de obras. Por lo tanto hay que promover la instalación de industrias.

Señaló que el impuesto al tabaco es impracticable. Además de atentar contras las industrias, pondría en riesgo miles de puestos laborales.

“Lo importante es hacer una ecuación económica, los impuestos se deben elevar gradualmente, no se puede aumentar de repente más del 10%  sobre un mismo impuesto”, dijo. De acuerdo con Ortiz, Paraguay no puede cometer el error en el que incurren otros países que aplican políticas muy agresivas de impuestos, señalando que ese tipo de conductas no hacen otra cosa que promover la salida de las industrias de un país determinado, o generar la evasión fiscal y el contrabando propiamente dichos.

“El error está que siempre se pone la mirada, desde el punto de vista de cometer los mismos errores de los otros países. Cuando un país tiene una política muy agresiva de impuesto, entonces las industrias empiezan a huir del lugar”, manifestó el empresario.

Referente a la evaluación de la suba de impuesto destaco que se debe realizar de acuerdo al comportamiento de la economía, para que el mercado se situé dentro del ámbito formal, si se realiza abruptamente  el mercado formal pierde espacio. El impuesto debe subir gradualmente, por ejemplo no puede pasar del 16% al 26%, sino 17%, tiene que elevarse razonablemente.

PROPICIAR EL MERCADO NEGRO

“Acá el sector tabacalero paga íntegramente sus impuestos, la evasión si hay es casi 0. Incluso ante este nivel de impuesto ya han aparecido algunas fábricas clandestinas que hace poco fueron desmanteladas. Si sube el impuesto, lo que se desarrolla es el “mercado negro”, subrayó.

Mencionó que Brasil a partir de su política errática de impuesto y además agresiva para con las industrias, hace que hoy varias de ellas se muden a nuestro país debido a que ya es imposible sobre vivir allá. Además propician la instalación de un enorme mercado ilegal.

Ortiz explicó que en la actualidad en Brasil existen más de 60 fábricas clandestinas, ya que es un gran negocio y además en todas sus costas están entrando productos de contrabando en barcazas provenientes de la China y de Oriente Medio.

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