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ASUNCIÓN.- Con el entusiasmo y los nervios previos al partido entre Paraguay y Argentina, nadie pareció notar que el estadio Defensores del Chaco estaba mucho más lleno de gente que lo que establece el protocolo sanitario, el cual dice que solamente se puede ocupar el 50% de los espacios, con distanciamiento entre la gente, la que debe tener permanentemente puesto el tapabocas.
De acuerdo a las imágenes transmitidas por los canales de televisión, nada de esto se tuvo en cuenta durante el partido de ayer, pero esto recién hoy notaron las autoridades sanitarias por lo que el Ministerio de Salud decidió pedir un informe a la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), entidad responsable del evento.
Esto lo dijo el ministro Julio Borba, quien añadió que dentro de 15 días se verán las consecuencias de lo ocurrido ayer. Lo lamentable es que este fue un plan piloto para ver a viabilidad de permitir la vuelta del público a los estadios y luego de esta abierta desobediencia a las reglas sanitarias, será muy difícil que las autoridades lo confirmen.
