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El diputado colorado Danny Durand presentó un proyecto de Ley que establece el cobro de peaje a quienes ingresen a la capital, por el motivo que fuere, en los siete puntos de acceso. Su argumento es que esto daría mayores ingresos a la Municipalidad de Asunción, con lo que mejoraría la vida de los capitalinos.
ASUNCIÓN.- El experifonero devenido en diputado parece estar convencido de que después de Calle Última, los ciudadanos son de segunda categoría. Dice que con la ley que propone, el municipio de Asunción recibiría unos 1.200 millones de guaraníes por día, que serían utilizados para mejorar la calidad de vida de los habitantes de la capital, los que, por lo visto, son los únicos de primera.
Hay 7 puntos de acceso a la capital, que son utilizados por unos 600 mil vehículos de personas que viven en los alrededores y que trabajan en el centro. Lo que pretende Durand es que cada uno de esos vehículos pague por “el derecho” de entrar a la ciudad, algo que, es cierto, se hace en capitales vecinas como Buenos Aires.
Sin embargo, lo que el diputado colorado no tuvo en cuenta es que en el caso de nuestro país, Asunción es subsidiada por el interior del país en gran medida, por lo que es absurdo pretender que, encima, los habitantes de otras ciudades y pueblos paguen por ingresar, como si fuera un privilegio que tuviera precio.
Esa idea de recaudar a cualquier costa, perjudicando el bolsillo de los contribuyentes, no puede llevar a ningún resultado positivo. La mejora en la calidad de vida de los asunceños no tiene por qué venir del perjuicio a los derechos de los habitantes del resto del país.
Además, el proyecto viola el artículo 41 de la Constitución Nacional que establece que el tránsito por el territorio nacional es libre para todos los habitantes.
Uno se pregunta si no hay cuestiones fundamentales, que hacen al bienestar de “toda” la población y que requieren acciones urgentes, o si es que hay algunos legisladores a los que, simplemente, la cabeza no les da para más y tienen que perder el tiempo con estupideces que no resisten ningún análisis serio, con el único objetivo de hacerse notar y recordar a la ciudadanía que están calentando al pedo una banca.
