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Legisladores de distintas nucleaciones, identificados con el actual gobierno, impulsarán el enjuiciamiento político de los miembros del TSJE. Esgrimen como pretexto el hecho de haber “aceptado” la renuncia de Sandra Zacarías a la intendencia de CDE, cuando en realidad lo que hizo fue constatar la decisión de la exjefa comunal y convocar a elecciones para cubrir la vacancia. El objetivo de fondo sería aprovechar los “números favorables” para copar la Justicia Electoral, lo que implicaría un gravísimo retroceso institucional.
ASUNCIÓN.- Diputados de Añetete y bancadas de la oposición pretenden someter a juicio político a Jaime Bestard, Alberto Ramírez Zambonini y María Elena Wapenka, miembros del TSJE, por haber convocado a elección del nuevo intendente de Ciudad del Este, luego de que Sandra McLeod presentara renuncia al cargo.
Los integrantes del tribunal tienen varias denuncias en su contra y hubo algunos intentos de enjuiciarlos políticamente, pero jamás se pudo alcanzar el número necesario para hacerlo debido a que es práctica común que ellos ofrezcan cargos en la Justicia Electoral a operadores políticos de todos los partidos, por lo que diputados y senadores se han mostrado siempre más que complacientes con ellos, haciendo la vista gorda ante verdaderos hechos que podrían derivar en delitos.
Ahora quieren enjuiciarlos y como, coyunturalmente tendrían los votos necesarios, posiblemente lo lograrán, no porque esta vez hayan cometido algún delito sino porque quieren aprovechar la mayoría para apoderarse de uno de los cupos más apetecidos del Estado, la Justicia Electoral, a fin de que el manejo de todas las elecciones nacionales estén en su poder.
Justamente se refirió a esto Kattya González, en la sesión del martes, cuando dijo que “con este tribunal jamás vamos a poder ganar elecciones los de la oposición”. Con esto está más que claro que la intención es tener un TSJE a la medida, a fin de que lo que no pueden conseguir con los votos, lo logren con trampa.
Lo que hizo el TSJE estuvo ajustado a derecho. Constató la renuncia de McLeod y convocó a elecciones para cubrir la vacancia, todo claro y simple. Los 3 miembros pueden tener varios cuestionamientos, pero su manejo de los procesos electorales siempre fue transparente y reconocido, incluso, internacionalmente. Si abdistas y opositores copan la Justicia Electoral, esto constituirá un grave retroceso para el proceso electoral paraguayo.
