WASHINGTON.- El Departamento de Seguridad Nacional indicó que 522 niños separados de sus padres como parte del combate a la inmigración ilegal se reunieron con sus familias, pero otros 2.053 menores permanecen al cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU.
En la primera publicación de datos oficiales desde que el presidente Donald Trump puso fin el miércoles a las separaciones familiares, el Departamento indicó que el proceso de reunificación está bien coordinado. “El Gobierno de EEUU conoce la ubicación de todos los niños bajo su custodia y está trabajando para reunirlos con sus familias”, agregó la cartera el sábado.
Una burla de sistema. Al tratar de detener el flujo de decenas de miles de migrantes de América Central y México que llegan a la frontera sur todos los meses, Trump ordenó a principios de mayo que todos los adultos que cruzaran ilegalmente los pasos limítrofes serían arrestados y sus hijos separados de ellos.
Después de que las imágenes de niños en recintos encadenados provocaran una ola de indignación en el país y en el mundo, Trump puso fin a la práctica de la separación, pero continuó con su discurso de línea dura sobre la inmigración.