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ASUNCIÓN.- De contramano con todo, especialmente con el normal funcionamiento de las instituciones, como ya es habitual en él, el candidato a la Presidencia de la República por la alianza opositora, Efraín Alegre, realizó una conferencia de prensa para exigir que la nueva fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, sea destituida del cargo, cuando apenas acabó de jurar.
Parece que ni él sabe muy bien cómo salirse con la suya y lograr que Quiñónez deje la Fiscalía. Habló de que “cuando gane las elecciones” convocará a una convención constituyente, pero no para reformar la Constitución, sino para destituir a la fiscal, algo que nadie sabía que podía hacer una constituyente.
En algún momento parece que también pensó en la posibilidad de un juicio político, pero le convencieron de que no tiene mucho sentido ya que Quiñónez acaba de asumir en sus funciones y es muy delirante pretender ya juzgarle por mal desempeño. Pero de alguna manera, Efraín quiere sacar a la fiscal. Posiblemente, lo que ocurre es que en su febril imaginación, ya tiene asumido que será el próximo presidente de la República y pretende poner un fiscal general del Estado que responda a sus intereses, algo que, él sabe muy bien, no logrará con la nueva titular del Ministerio Público.
