El ministro británico de Exteriores, David Lammy, consideró este martes que la decisión del candidato presidencial venezolano Edmundo González Urrutia de buscar asilo en España es “una que ningún político debería tomar” y responde a la “represión” en Venezuela.
En un declaración difundida por el Foreign Office, Lammy señaló que la salida del país del opositor para pedir asilo político en España llega tras “meses de represión e intimidación contra figuras de la oposición y de la sociedad civil en Venezuela”.
Londres rinde homenaje a los millones de venezolanos que acudieron a votar en las elecciones del 28 de julio y recuerda que las autoridades electorales todavía no han publicado los resultados completos ni una “evidencia creíble” de la victoria del presidente Nicolás Maduro, según la declaración.
”Continuamos profundamente preocupados por las acusaciones de graves irregularidades en los resultados declarados”, manifestó Lammy.
Al mismo tiempo, dijo que los datos que han sido puestos a disposición del público hasta ahora muestran que González Urrutia obtuvo una mayoría de votos “por un margen importante”.
El ministro laborista calificó de inaceptable la “actual represión” en Venezuela, e instó a la defensa de los derechos humanos y al final de las detenciones arbitrarias en el país latinoamericano.
El Reino Unido, subrayó, sigue trabajando con sus socios para una solución pacífica en Venezuela y cree que el diálogo es la única vía para garantizar que la voluntad de los ciudadanos es respetada.
La declaración del candidato
Gonzalez Urrutia arribó el domingo a un aeropuerto militar cerca de Madrid, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores de España, acompañado de su esposa y funcionarios españoles.
En la tarde, emitió su primer mensaje y afirmó que su partida de Caracas “estuvo rodeada de episodios de presiones, coacciones y amenazas de no permitir mi salida. Confío que próximamente continuaremos la lucha por lograr la libertad y la recuperación de la democracia en Venezuela”.
“Lo he hecho para que cambien las cosas y construyamos una etapa nueva para Venezuela”, dijo el opositor venezolano.
En su declaración, González Urrutia hizo un llamado a la “política del diálogo” y pidió que “solo la democracia y la realización de la voluntad popular puede ser el camino para nuestro futuro como país”, algo en lo que seguirá “comprometido”.
Ahora mismo, dijo, la libertad de los presos políticos es su “gran prioridad” y una “exigencia irrenunciable”.
La líder de la oposición María Corina Machado dijo que González había temido por su vida si se quedaba.
“Su vida corría peligro, y las crecientes amenazas, citaciones, orden de aprehensión e incluso los intentos de chantaje y de coacción de los que ha sido objeto, demuestran que el régimen no tiene escrúpulos ni límites en su obsesión de silenciarlo e intentar doblegarlo”, escribió en la red social X, antes Twitter.
González Urrutia, ex diplomático de 75 años, fue el sustituto de última hora cuando se prohibió a Machado presentarse. Su campaña, desconocida para la mayoría de los venezolanos, despertó rápidamente las esperanzas de millones de personas desesperadas por un cambio tras una década de desplome económico.
Aunque el dictador Nicolás Maduro fue declarado vencedor de los comicios de julio, la mayoría de los gobiernos occidentales aún no han reconocido su victoria y exigen a las autoridades que publiquen un desglose de los votos. Mientras tanto, las hojas de recuento recogidas por voluntarios de la oposición en más de dos tercios de las máquinas de votación electrónica indican que González ganó por un margen de más de 2 a 1. Fuente: Infobae