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ASUNCIÓN. A las 09.00, en la morgue judicial de Asunción, se iniciará la autopsia al cuerpo calcinado hallado ayer en Minga Guazú y que se presume sería de la niña de 7 años raptada en la tarde del sábado del barrio Caburey de la citada ciudad altoparanaense.
El hallazgo de los restos se produjo en la tarde del domingo, en el km 26 Monday de Minga Guazú.
El principal sospechoso, Héctor Eduardo Martínez Núñez, de 25 años, quien confesó el crimen, está preso, al igual que su supuesto cómplice.
El rapto se produjo aproximadamente a las 18.00 del sábado, en la calle, cuando la pequeña regresaba de la despensa. Los vecinos vieron cuando Héctor y otro hombre alzaron a la fuerza a la niña a un vehículo.
El móvil sería una venganza. Martínez Núñez era pareja de la prima de la menor, quien lo dejó justamente por ser violento. El criminal habría prometido vengarse “con lo que más les duela”. Decidió raptar y matar a la niña para “golpear” a los familiares.
El cuerpo hallado ayer corresponde a una criatura, pero aún existe la esperanza de que no se trate de la pequeña llevada de Minga Guazú.
