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WASHINGTON, D.C. Los líderes estatales y nacionales en los Estados Unidos manifestaron una creciente voluntad de reducir los bloqueos relacionados con el coronavirus, incluso cuando el aumento de las pruebas mostró que el número de personas infectadas por el virus superó el millón por primera vez este martes.
Más de 57.000 personas murieron por complicaciones del COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, informaron hoy funcionarios de salud pública de la Universidad Johns Hopkins.
El número de casos reportados en los Estados Unidos se ha duplicado en los últimos 18 días, y ahora representa un tercio de todas las infecciones en el mundo. Alrededor del 30 por ciento de los casos han ocurrido en el estado de Nueva York, seguido de Nueva Jersey, Massachusetts, California y Pensilvania.
A pesar del hito sombrío, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, estuvo a la vanguardia de las llamadas para impulsar la economía del país. En una conferencia de prensa ayer lunes, instó a algunos líderes estatales a “comenzar a pensar en las aperturas escolares, porque mucha gente quiere tener las vacantes escolares”.
Se habla de la reapertura de las escuelas cuando algunos estados, particularmente los rurales, comienzan a reabrir negocios cerrados en un esfuerzo por evitar el costo económico de las órdenes generalizadas de quedarse en casa. Las estrictas medidas de distanciamiento social y el cierre de negocios en todo el país han congelado la economía.
Al menos 26 millones de ciudadanos estadounidenses solicitaron beneficios de desempleo en las últimas cinco semanas, la mayor cantidad desde la Gran Depresión de la década de 1930.
Trump dijo en su sesión informativa el lunes que “hay hambre de reapertura”.
Fuente: Al Jazeera
