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ASUNCIÓN. Para el ministro del Interior, Euclides Acevedo, este podría no ser el momento adecuado para iniciar el debate sobre la reforma del Estado, porque ahora todas las fuerzas deberían estar centradas en el combate al coronavirus.

El Ejecutivo, a través del vicepresidente Hugo Velázquez, decidió iniciar una mesa de diálogo para lograr la reforma integral del Estado, para lo cual hoy a las 11 se realizará la primera reunión con representantes de los poderes, partidos políticos y gremios de la producción.

Acevedo aseguró que “la reforma del Estado es una asignatura que debió abordarse hace mucho tiempo y ahora cobra magnitud mediática por la situación en la que nos encontramos, y nos damos cuenta gua’u de la mala distribución del gasto público. No sé si hay el ambiente; lo que no quiero es entretenernos en excusas tangenciales y no abordar temas fundamentales como la lucha contra el coronavirus”.

“La reforma del Estado no solo pasa por la reforma constitucional, sino cultural. De qué nos sirve una reforma constitucional si no tenemos el hábito del diálogo, si no hay una política que apueste por la cultura. Todo el mundo da dinero a todos, qué pasa con los teatreros, músicos, etc.; vale decir que la reforma estructural del Estado no es una cuestión jurídico administrativa, es una cuestión política”, añadió.

Acevedo manifestó que “para mí, la apuesta es fundamentalmente el debate del aparato productivo del pensamiento. Si no salimos por la vía del pensamiento no vamos a liberarnos, vamos a tener prótesis y no reforma”.

En cuanto a la respuesta ciudadana a las medidas restrictivas adoptadas por el gobierno, el ministro expresó que “nuestro comportamiento, además de disciplinado, fue eficaz. La gente cumple más por convicción que por miedo, aunque datos dicen que es el temor a la fuerza y al Ministerio Público que hace que la gente respete. Ustedes están transmitiendo criterios y conductas que deben ser aprovechadas en el buen sentido del término. Mucha gente en Semana Santa va a respetar y va a ser como consecuencia del llamado que hacemos, la explicación que damos. Cada día voy creyendo más en la disciplina social, que no debe confundirse con sumisión”.