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ASUNCIÓN. Mayra Thalía González Quintana tenía 23 años y vivía en pareja con Aldo Ariel López González, de 40, médico del Sanatorio San Martín de la capital, quien la llevó hasta allí esta mañana, sin vida, aduciendo que se había “ahogado en su propio vómito”.

Sin embargo, la autopsia practicada por el forense de la Fiscalía, doctor Pablo Lemir, tiene conclusiones espantosas puesto que revelan que su muerte fue violenta, porque se encontraron al menos 5 indicadores que así lo señalan.

El profesional detalló las lesiones encontradas en el cuerpo de la joven: lesiones en el cuello, que demostrarían un intento de asfixia; 2 lesiones contusas en el cráneo y hemorragia cerebral. Además, se encontraron lesiones antiguas que demuestran que Mayra fue torturada con frecuencias.

Lemir dijo que, además, se encontró una serie de heridas de inyecciones en los tobillos y que el edema pulmonar podría haber sido motivado por el consumo de sustancias, aunque aún no tiene un informe concluyente al respecto.

López González la llevó hasta el sanatorio, aduciendo una muerte accidental. La familia de la víctima dijo haber perdido todo contacto con ella desde hace tiempo. Se aguarda la intervención de la Fiscalía en este que parece ser un nuevo caso de feminicidio.