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La fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, de una vez por toda debe ordenar el inicio de la investigación sobre el negociado cometido entre Nicolás Leoz y Aldo Zucolillo, director del diario ABC, con el dinero de la Confederación Sudamericana. La causa está a cargo del fiscal Hernán Galeano, quien hasta el momento no impulsó la pesquisa. El Ministerio Público tiene todos los elementos -presentados por el actual titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez- para procesar a los implicados en el millonario desfalco.
ASUNCIÓN.- Hasta se podría afirmar que el fiscal de la causa, Hernán Galeano, es un inoperante ante la denuncia que involucra a Leoz y Zuccolillo, a lo que se debe sumar la ineptitud de Quiñónez para profundizar la investigación, ya que todos los elementos están sobre la mesa, pero que ni la Fiscal General y mucho menos Galeano, no lo ven o no lo quieren ver.
Según la denuncia del presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez Wilson-Smith, se realizaron millonarios depósitos en el Banco Atlas, propiedad de Zuccolillo. “La ausencia de registros contables motivó a los auditores a solicitar al Banco Atlas información sobre depósitos de ahorro de diversas cuentas. Sin embargo, el señor Miguel Ángel Zaldívar, yerno de Zuccolillo y presidente del Banco Atlas, invocó la restricción del secreto bancario para no proveer información alguna.
Zuccolillo deja pasar una ocasión clave para saber a dónde fue a parar la plata del fútbol. La Ley de Lavado de Dinero exige la constatación de los fondos cuando estos superan más de US$ 10 mil; el doctor Leoz depositó casi US$ 1.000.000 en efectivo. ¿Habrá Atlas comunicado a la Seprelad? ¿Cuánto lucra el banco con la plata depositada por Leoz? Esta plata y lucro eran y son del fútbol, no de Leoz y menos de Zuccolillo”, había manifestado en su momento el conocido empresario y recientemente electo de la Conmebol.
Sin embargo, todos estos elementos dados por Domínguez, al parecer no son tenidos en cuenta por el fiscal investigador. Hernán Galeano es el fiscal que tiene a su cargo el caso del empresario brasileño Darío Messer y es muy diligente ante su apuro por investigar a los implicados.
Muy diferente fue su actitud cuando se trató del supuesto lavado de dinero en el cual estuvieron involucrados Nicolás Leoz, entonces titular de la Conmebol y el Banco Atlas, también propiedad de su amigo, Aldo Zuccolillo. ¿Qué encubre Galeano y por qué la Fiscal General le sigue el juego a su subordinado? ¿Acaso no todo el mundo es igual ante la ley o para Galeano existen privilegiados? Son preguntas que tanto el fiscal de la causa Messer como Sandra Quiñonez deben responder a la sociedad, que espera que le dé la misma celeridad en la investigación del “negociado” entre Zucolillo y Leoz.
Basta con estudiar la ágil actitud del fiscal Galeano en el caso Messer (motivo de interés del diario ABC) y compararlo con la lentitud y la parsimonia que tuvo cuando le tocó investigar el supuesto affaire entre Leoz y Zuccolillo para empezar a imaginar que el agente parece muy influenciado por el dueño del matutino, a quien, al parecer, busca satisfacerlo en todo.
