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ASUNCIÓN. Falta menos de mes y medio para la sesión preparatoria en la que los senadores elegirán a su nueva mesa directiva para el período que se inicia el 1 de julio próximo y las negociaciones entre todas las bancadas va en aumento ya que en la Cámara Alta se da una situación diferente que en Diputados, en donde las bancadas coloradas tienen mayoría propia y basta un acuerdo entre sus componentes para decidir las elecciones.

En el Senado, de 45 miembros, los colorados solo tienen 17 bancas; si bien es el bloque más numeroso, no le alcanza para tener mayoría propia (23) por lo que para todo tienen que negociar con otros sectores de la oposición, normalmente la bancada llanista.

Pero esta vez pareciera que la cosa se dará todos contra todos, ya que hay 4 aspirantes colorados, 1 liberal y 1 de Frente Guasu con ambición de ocupar la Presidencia del Senado y del Congreso, lo que hace que el electo integre la línea de sucesión a la Presidencia de la República.

Los colorados son el presidente actual, Óscar Salomón, quien contaría con el apoyo de bancadas de la oposición que pretenden conservar la mayoría de la cámara. La cosa se le complica porque su principal aliado, Frente Guasu, esta vez parece querer competir con la candidatura de Fernando Lugo.

Los otros colorados oficialistas tendrían el apoyo de la bancada de Honor Colorado, que nuevamente no presentará candidatura propia. Son Juan Carlos Galaverna, Enrique Bacchetta y Silvio Ovelar; este último con ganas de ser reelecto para un segundo período.

En el PLRA también quieren quedarse con el premio mayor y pretenden postular a Víctor Ríos a la Presidencia de la cámara.

A medida que se acerque la fecha de inicio del período, en donde ya tendrá que estar elegida la mesa directiva, es de imaginar que las negociaciones irán creciendo en intensidad. Quien resulte electo tiene que serlo con el voto de la mayoría absoluta de la cámara, es decir, 23 senadores.