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Los debates políticos y electorales, así como los reclamos campesinas, acaparan los principales espacios de determinación de otros temas; entre ellas el gravamen a la exportación de soja que está en una suerte de cuarto intermedio en el Senado. Un estudio que obra en las comisiones de esta instancia indica que las cifras de negocios de cada campaña no se reflejan en el tributo al Estado. La campaña 2014 exportó por US$ 2.558 millones, sin embargo las agroexportadoras ingresaron en concepto de impuesto a la renta US$ 14 millones; el 0,5% de la facturación total.
ASUNCIÓN.- El análisis numérico que obra en el Senado utiliza la campaña de 2014 como base de cálculo e indica que “como el impuesto a la renta para las agroexportadoras oscila entre 10% y el 25% se puede deducir que estas declararon utilidades entre US$ 140 millones como máximo y US$ 56 millones como mínimo y enconsecuencia y conforme a estos datos la utilidad de estas exportadoras en el 2014 estuvo entre el 2% y 5,4% sobre sus ingresos brutos”.
La Cámara de Senadores aprobó en general un proyecto de Ley que grava la exportación y posteriormente cayó en un compás de espera que permitió al Poder Ejecutivo pulir una intención de modificación de IVA Agropecuario del 5% al 10%.
Todo esto quedó en segundo plano y reemplazado por los debates políticos y electorales y el nuevo arribo de pequeños productores con exigencias de condonación de su deuda.
Destaca el material que obra en Cámara Alta que “Si bien los márgenes de ganancia parecen poco en términos de porcentaje sobre la facturación, sin embargo, debido al gran volumen de los negocios las utilidades no están nada mal para el mercado local. Esta media docena de empresas agroexportadoras obtuvieron el año 2014 una ganancia de entre 56 y 140 millones de dólares de ganancia”.
SUBFACTURACIÓN
Desde 2002 hasta el 2012 los controles tributarios fueron laxos y se filtraban importantes negocios de la agroexportadoras en base al falseamiento de facturaciones para remesar utilidades sin el pago impositivo.
“El último informe de la Global Financial Integrity, denominado Flujos Financieros Ilícitos coloca al Paraguay entre los primeros 20 países del mundo con mayor salida de dólares como consecuencia del falseamiento de facturas comerciales”, destaca el material y agrega que “entre el 2003 y el 2012 la subfacturación de las exportaciones paraguayas habría permitido la salida ilícita de 18 mil millones de dólares”.
Las subfacturaciones también se verificaban en las importaciones y en este caso, dice la organización “la diferencia fue de alrededor de 17.000 millones de dólares en el periodo investigado, desde 2002 hasta 2012”.
En total el falseamiento de los datos en las facturas de exportaciones e importaciones dio lugar a una salida ilegal de US$ 35.000 millones, por lo que la evasión del impuesto a la renta habría sido mayor a US$ 3.500 millones en los diez años estudiados.
