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SAN ESTANISLAO.- Luis Alberto Martínez Jara fue imputado por los delitos de simulación de un hecho punible y extorsión en grado de tentativa. Él mismo es investigado por la fiscal Sandra Ledesma, porque habría proporcionado información falsa a la Policía de Antisecuestros, sobre un aparente plan de supuesto secuestro del dueño de la estancia Toribio Bruyn, donde trabajaba. Se sospecha que su objetivo era asustar a su empleador para obtener dinero.
Los hechos se remiten al pasado 5 de enero, a las 17:00, cuando el imputado, quien se desempeñaba como administrador de la estancia ubicada en la localidad sampedrana de Guayaibí, comunicó al personal policial del Departamento de Antisecuestro que cuatro hombres llegaron a la hacienda con la supuesta intención de adquirir ganado vacuno. De acuerdo al relato de Martínez, estos hombres supuestamente requirieron datos de Adolfo Lovera, patrón del establecimiento. A cambio de esa información -específicamente los días en que el dueño de la estancia estaría en la misma- estas personas supuestamente ofrecieron al capataz la suma de 100.000 dólares americanos.
Dos días después, nuevamente el administrador Martínez habría contactado con los agentes policiales, y manifestó que encontró un cartucho de bala con la inscripción “muerte”. También dijo que fue atacado a tiros, pero que salió ileso. Debido a algunas inconsistencias en su relato y a los resultados de los estudios de ciertas evidencias, la representación fiscal presume que Martínez Jara habría proporcionado información falsa a la Policía, con el objetivo de que el dueño de la estancia, por temor a ser secuestrado, entregase una considerable suma de dinero.
