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SANTA ROSA DEL AGUARAY. Padres de familia de al menos 180 alumnos de la Escuela Básica N° 7.104, San Roque, de Jaguarete Forest, a 50 kilómetros de este distrito, se negaron a que sus hijos asistiesen al primer día de clases por temor a que los pequeños sufran algún percance, dadas las condiciones actuales del pabellón que suelen utilizar para estudiar.

Representantes de los jefes de hogar se valieron de una página informativa local, en una red social, para compartir que, en enero de este año, un temporal destechó la institución.

Añadieron que, provisoriamente, cooperaron entre todos y cubrieron con chapas metálicas el techo de la escuela, para luego solicitar la ayuda correspondiente al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC).

Agregaron que, curiosamente, los albañiles llegaron antes que los materiales necesarios para las reparaciones y que solo hace dos semanas trajeron los tejuelones y tejas y, como si eso no bastara, los trabajadores de la construcción avisaron que la obra estaría terminada recién para el final de abril o el principio de mayo próximos.

Aparte, los obreros estarían “reciclando” los tirantes de madera para el tejado, lo que según los padres de familia representa todo un riesgo para los chicos y los docentes.

Asimismo, los pobladores solicitan al MEC la recuperación de las horas cátedras que le fueron sacadas a la institución y la habilitación del nivel medio de enseñanza. Esto último porque los chicos que deben ir al colegio tienen que caminar hasta 5 o 10 kilómetros diariamente si quieren seguir sus estudios.

Y están aquellos que, ante esta dificultad, optan por abandonar su educación formal y van a trabajar a las chacras, lo que aumenta la deserción escolar.

Finalmente, también piden la construcción de baños sexados y uno para chicos con capacidades diferentes, ya que este año tendrán dos de ellos en la escuela.