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La Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) dio a conocer un comunicado en el que cuestiona las notas reversales de la Entidad Binacional Yacyretá. Una vez más interviene en cuestiones políticas que no forman parte del ámbito de su competencia. Además, cuando Fernando Lugo, exobispo, quiso “rifar” la EBY, entregando la deuda a la banca privada, tal como como reveló en un audio el ex director de Yacyretá, lado argentino, Óscar Thomas, la jerarquía de la Iglesia Católica de nuestro país, que se maneja como un “cartel”, no dijo nada.
ASUNCIÓN.- Los obispos de la Conferencia Episcopal (CEP) difundieron un documento por la que solicitan al presidente Horacio Cartes “la postergación de la sanción y promulgación de las Notas Reversales para evaluar en forma más completa las repercusiones que tendrán esa promulgación para los bienes, los recursos y la soberanía nacional”.
Los prelados acudieron a medios que no son los responsables de los acuerdos. Acudieron a profesionales de las Universidades Nacional de Asunción y de la Católica. Hasta el momento, no hay conocimiento alguno del pedido de alguna reunión con referentes técnicos que asistieron a las negociaciones con sus pares argentinos.
La CEP solicita al Ejecutivo el aplazamiento de la sanción, paso que no corresponde a esta instancia; pues corresponde al Congreso, además ya fue sancionada. Lo que cabe al presidente Cartes es la promulgación que está pendiente.
El episcopado concluye que los cambios en Tratado afectan a “la soberanía energética y nacional” y sobre esa base “eleva la voz de alerta” que según su análisis “puede perjudicar el futuro de Paraguay”.
Asegura que la sociedad paraguaya pasa por una situación difícil y exige explicaciones; sin embargo, la CEP no acude a las fuentes buscando los esclarecimientos que reclama.
El documento emitido dice al respecto que “en un momento difícil que atraviesa nuestra sociedad, asediada por antivalores que dañan la credibilidad de las instituciones y de las autoridades, es primordial la gestión trasparente, responsable y orientada al bien común; que está siempre por encima de intereses particulares y sectoriales”.
Sin embargo, los obispos no dijeron nada cuando Fernando Lugo, exintegrante del clero, quiso entregar la deuda de Yacyretá a la banca privada. En un audio se pude escuchar a Óscar Thomas revelar cómo querían “rifar” a la Entidad: “Querían transformar de un acreedor condescendiente, blando y contemplativo para con Yacyretá por un acreedor privado a quien debíamos pagar 300 millones por año, que privilegiemos los pagos a un privado y no arreglemos nuestras turbinas, no hagamos Aña Cuá, no hagamos Corpus. Eso es lo que quieren para hacer un negocio financiero con la banca privada, de eso se trata, no era otra cosa. Eso pone en riesgo la vialidad de Yacyretá”, decía por Lugo y su entonces secretario privado, Miguel López Perito. Pero para la CEP no se pronunció al respecto.
La promulgación de las reversales modificará el tratado y establecerá la reducción de la deuda de Yacyretá con el Tesoro de Argentina, de US$ 17.000 millones a US$ 3.800 millones.
Se logró la indemnización a Paraguay con US$ 940 millones en compensación por la inundación del territorio paraguayo durante la construcción.
También establece por primera vez la cogestión de la Entidad Binacional de Yacyretá (EBY), con cargos tanto argentinos como paraguayos.
