ASUNCIÓN.- Los dichos que desataron la tormenta se enmarcan en otros hechos “curiosos”, por decir lo menos. Una foto del presidente con el propio Cucho, en el quincho de su casa, cuando todavía era candidato, y el apresamiento de su principal referente del Alto Paraná, Ulises Quintana, precisamente por el mismo caso de narcotráfico por el cual fue capturado el presunto capo narco.
Cuando se conoció la foto de Marito con el ahora detenido, en donde se veía un sofá que tenía una mochila encima, el entorno presidencial dijo que había sido “trucada”, por un lado, aunque por otro afirmaban que el entonces candidato a la Presidencia recibió a tanta gente en su domicilio, que no recordaba haber conocido a Reinaldo Cabaña. Sin embargo, el diputado Quintana sí reconoció que había llevado a “su amigo” Cucho junto al candidato presidencial.
Para colmo, Quintana también reconoció que Cucho había aportado a su campaña electoral, aunque se había negado a opinar sobre la posibilidad de que el dinero haya alcanzado también al candidato a la Presidencia. Esto hubiera quedado como un hecho anecdótico, pero ahora, a la luz de los nuevos datos dados por el abogado del presunto narco, las cosas toman una perspectiva diferente.
Pero resulta que la acusación de Valdez pone todo en perspectiva, y ante esto lo único que se puede hacer es que los órganos jurisdiccionales tomen la posta y abran una investigación.