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CIUDAD DEL ESTE.- En la mañana de este lunes, estudiantes del Colegio “Roberto L. Petit” del km 8 Acaray de esta ciudad levantaron la toma de la institución e inmediatamente se retomaron las clases, luego de la firma de un acta de compromiso entre los alumnos, autoridades del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y representantes de la Municipalidad de Ciudad del Este.
Los estudiantes habían tomado este centro educativo el viernes 7 de octubre al mediodía, exigiendo la realización de las obras que debían ejecutarse con recursos del Fonacide, así como la construcción del salón auditorio, el recapado de la pista, tinglado, resolución del conflicto relacionado al inmueble de la institución, biblioteca y reparación de la sala de informática.
Representantes del MEC firmaron este lunes un acta de conformidad, donde se establecieron los compromisos y los alumnos levantaron la toma de la institución, por lo que las actividades educativas se normalizaron.
Como parte del acuerdo, el arquitecto Juan Roa, en representación de la Municipalidad de Ciudad del Este, realizó la medición de la cancha, como también la evaluación técnica del estado edilicio de la loza y techo, para elevar un informe al municipio, de tal manera sirva como documento base para el inicio de estas obras.
Jonhatan Candia, representante estudiantil del referido colegio, expuso que recurrieron a la medida de fuerza extrema debido a la falta de respuestas de las autoridades locales y educacionales, por lo que se “cansaron de las promesas”, afirmó. “Solo hemos reclamando nuestros derechos y en tal carácter hemos pedido apoyo de esta manera”, agregó.
Los supervisores del MEC se comprometieron a acompañar las obras a ser realizadas por la Municipalidad de Ciudad del Este y los estudiantes levantaron la toma de la institución y retomar las actividades académicas, según el acta firmado ayer.
Igualmente, los líderes estudiantiles rubricaron sus respectivas firmas en el documento, con el firme compromiso de que recurrirán al diálogo antes de tomar cualquier medida de presión. En tanto, los supervisores que formaron parte de la negociación expresaron que “todas las inquietudes de los estudiantes están siendo atendidas por el Ministerio de Educación, la clave es el diálogo y encontrar entre todos mecanismos apropiados para la resolución de los conflictos y por ende, que los estudiantes no pierdan clases”, expresaron.
