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ASUNCIÓN.- La Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República no contempla la posibilidad de que el fiscal general pida permiso para apartarse temporalmente del cargo, según el doctor José Casañas Levi, así que la decisión de Javier Díaz Verón es absolutamente irregular.
El artículo 51 de la ley mencionada, dice que en caso de enfermedad o ausencia temporal, el fiscal será reemplazado (de manera provisoria) por el adjunto que él mismo designe. Y en caso de inhabilidad o muerte lo reemplazará el adjunto en lo penal, de manera permanente hasta tanto se designe a su sucesor.
Lo que hizo Díaz Verón fue tomar partes de lo que dice la ley y mezclarlas generando una situación insostenible. En primer lugar, siendo la cabeza del Ministerio Público, ¿a quién pidió permiso? ¿A él mismo? Además, por un lado habla de que su permiso es temporal, pero habla de que está inhabilitado, lo que, según la ley, es permanente.
Según Casañas, la decisión de Díaz Verón lo que hace es que “nos está demostrando una vez más el desconocimiento que tiene sobre la ley”. Es más, según el abogado, desde el momento en que el fiscal no presentó renuncia al cargo al vencer su mandato, en diciembre de 2016, ya se lo debió someter a juicio político por mal desempeño en sus funciones.
