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ASUNCIÓN.- Este martes se presentó el informe de resultados de las investigaciones realizadas sobre el Acuífero Patiño, que estuvo a cargo del del ministro del Ambiente y Desarrollo Sostenible, Ariel Oviedo.
Según la presentación, el proyecto “Estudio de Recursos Hídricos y vulnerabilidad climática del Acuífero Patiño” representó un avance importante para la gestión del acuífero Patiño.
Además, durante estos estudios se identificó los principales problemas, así también se ha podido predecir la evolución de los niveles del acuífero a corto, medio y largo plazo considerando la variabilidad y el cambio climático.
Al respecto, el Titular del MADES, Ariel Oviedo, sostuvo que se tiene en manos el futuro de nosotros sino también de las futuras generaciones, por lo que existe una dura tarea y una gran responsabilidad de ir tomando conciencia de la situación en que está teniendo el medioambiente.
Oviedo pidió el involucramiento de todos los sectores para tomar acciones concretas, mediante la concienciación y apoyo a los procesos que se viene llevando adelante desde el MADES.
Según el informe, dado a conocer por la Dirección General de Protección y Conservación de los Recursos Hídricos (DGPCRH), encabezada por el director ing. David Fariña, la contaminación por nitratos, la concentración de la extracción de agua en el oeste del acuífero y la salinización del agua en el norte son los principales problemas a los que se debe hacer frente mediante una gestión holística del acuífero, que considere de forma integrada los recursos superficiales y subterráneos como un único recurso.
El MADES, a través del proyecto se ha fortalecido con un conjunto de herramientas para la gestión, como el plan de monitoreo que permitirá realizar un seguimiento, control y vigilancia del acuífero para anticiparse a los problemas que puedan surgir, los modelos de flujo y transporte suponen una herramienta predictiva de primer nivel con la que se puede evaluar posibles escenarios futuros de explotación y los mapas de vulnerabilidad generados que permitirán gestionar el territorio limitando los usos que suponen una amenaza al acuífero.
El proyecto es liderado por el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), a través de la Dirección de Protección y Conservación de los Recursos Hídricos (DGPCRH), financiado por la AECID a través del BID y ejecutado por el grupo consultor INCLAM y HQA.
