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Ante la escasez de sacerdotes en la Iglesia católica, el papa Francisco se manifestó a favor de admitir que hombres casados puedan formar parte del clérigo, abriendo de esta manera la posibilidad dar cabida a “hombres probados” para ejercer el ministerio sacerdotal. Esta alternativa podría igualmente traer aparejada con ella la erradicación de casos de pedofilias y acosos que hoy día afecta a cientos de presbíteros y obispos, aunque los movimientos eclesiales de nuestro país no quieren opinar al respecto, hasta tanto se oficialice por parte de la jerarquía eclesial esta figura.
ASUNCIÓN.- En una entrevista con el periódico alemán Die Zeit, el Sumo Pontífice días pasados habló de los “viri probati” para combatir la escasez de clérigos en la Iglesia Católica. Sin embargo, el debate aún no se instaló al interior de la Iglesia Católica, por lo que varios movimientos y sacerdotes de nuestro país consultados al respecto, prefirieron “no opinar” hasta que la discusión “se profundice”, dijeron.
Sin embargo, esta situación podría favorecer enormemente a la Iglesia Católica desde el punto de vista de los casos de abusos, acosos y pedofilias que afecta a cientos de sacerdotes a nivel mundial, aunque para llegar a esta figura, el debate debe ser amplio y conforme a los Derechos Canónicos, precisaron algunos sacerdotes consultados al respecto.
De hecho, la Iglesia permite la figura de los “laicos comprometidos”, que son personas, en su mayoría, casadas o viudas y que optan por el servicio eclesial, pero que no administran los sacramentos, tal como se los confieren a los sacerdotes.
“Necesitamos considerar el ‘viri probati’ podría ser una posibilidad”, había dicho el Papa Francisco en la entrevista. El “Viri probati”, es el término latín para “hombres probados”, con el cual el derecho canónico se refiere a los hombres casados de excelente fe y virtud a los que, de modo extraordinario, se admitiría la ordenación sacerdotal.
Igualmente, en la entrevista Francisco había mencionado que “si es el caso, tendríamos que determinar qué deberes podrían asumir, por ejemplo, en comunidades remotas”. De esta manera, dejó entrever que para instalar esta figura en el seno de la Iglesia católica, el debate se debe basar en lo que establece el Derecho Canónico”, principalmente respecto a la escases de sacerdotes que se tiene a nivel mundial.
La otra figura que establece la normativa que rige a los clérigos, es la de los “sacerdotes secularizados”, que son aquellos presbíteros católicos que, ordenados legítimamente y habiendo ejercido su ministerio durante un tiempo, optan por pedir “dispensa” de sus obligaciones al papa, normalmente para poder contraer matrimonio.
Sin embargo, los movimientos católicos y algunos sacerdotes consultados sobre el tema, prefirieron guardar silencio, bajo el argumento que es un tema amplio a debatir, según dijeron. La falta de sacerdotes a nivel mundial está creando un enorme problema para la Iglesia Católica, por lo que el Papa estaría abierto a modificar las reglas de elegibilidad para el sacerdocio.
