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ASUNCIÓN. Solamente 18 de los 45 senadores participaron de la reunión de la mesa directiva, abierta para todos, en la que se escuchó a los representantes del Tribunal Superior de Justicia Electoral y de Contrataciones Públicas, sobre lo relativo al proceso de licitación para el alquiler de las máquinas de votación, que fuera suspendido la semana pasada.
En la sesión del jueves pasado, fueron muchos los que hablaron y criticaron, unos a la Justicia Electoral y otros al director de Contrataciones, Pablo Seitz. Algunos, incluso, como la bancada de Patria Querida, denunciaron que había una jugarreta del gobierno y el Partido Colorado, con la intención de evitar el desbloqueo de listas. Fue por eso que se decidió la reunión de hoy, pero ni siquiera los patriaqueridistas mostraron mucho interés, ya que solamente estuvo Georgia Arrúa y brillaron por su ausencia Stephan Rasmussen y Fidel Zavala.
Es más, si hubiera sido una sesión del pleno, ni siquiera hubiera habido quórum para realizarla. Esto nos demuestra una vez más que una mayoría de nuestros legisladores bailan al son de la música que se les toca en algunos medios de comunicación, pero que, a la hora de la verdad, evitan comprometerse con cualquier situación que pudiera sacarles de su zona de confort.
La discusión no llevó a nada, a pesar de haber durado casi 3 horas. Sin embargo, allí quedaron sentadas posiciones importantes, a pesar de la escasa concurrencia. Las opiniones están centradas entre quienes ratifican que el proceso de desbloqueo no tiene retroceso, y los que exigen al TSJE que lo anulen y hagan un nuevo llamado, en base a un pliego diferente de bases y condiciones.
Tampoco a los diputados parece haber interesado mucho el tema, ya que, a pesar de que el Senado extendió la invitación a la Cámara Baja, solamente estuvieron uno de Patria Querida, Sebastián Villarejo; una del PLRA, Celeste Amarilla; y dos del Encuentro Nacional, Kattya González y Norma Camacho. Menos mal que dicen que el futuro de la democracia paraguaya es la que está en juego.
