ASUNCIÓN. Desde el 2012 hasta 2017 ingresaron al Tesoro paraguayo para el Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) cerca de 2.200 millones de dólares. Sin duda es una suma importante en 5 años.
Pero el sector de la educación sigue con muchos inconvenientes. Actualmente, el Ministerio de Educación y Ciencia (MEC) dice que más de 3 mil instituciones educativas de todo el país necesitan de algún tipo de reparo. Pero no hay recursos necesarios para atender a todos.
La Ley 4758/2012 que crea el Fonacide establece que solamente el 25% de los 360 millones de dólares anuales que recibe del Brasil en concepto de cesión de la energía paraguaya de Itaipú, es destinado para los municipios y las gobernaciones.
El resto va a diferentes organismos e instituciones dependientes del Estado paraguayo.
De los cerca de 2.200 millones de dólares que ya se recibieron, 540 millones de dólares debieron ser destinados a las comunas y gobiernos regionales. De esta suma, 270 millones de dólares tuvieron que ser usados para infraestructura en los últimos 5 años.
Del dinero que los municipios y gobernaciones reciben, el 50% es para infraestructura, mobiliarios y equipamientos. Un 30% para alimentación y el resto 20% se puede usar en obras en otros sectores.
Lo que muy poco se sabe es qué se hace con los otros 75% del Fonacide que desde el 2012 hasta 2017 corresponde a cerca de 1.600 millones de dólares.
En la mayoría de las instituciones educativas de nivel inicial existen sinnúmeros de problemas que no son atendidos debido a la falta de recursos. Todos los años se presenta el mismo dilema. Hay muchas obras por realizar, pero falta recursos.