TAILANDIA.- En memoria de Saman Kunan, buzo fallecido durante la operación de rescate, de los 12 niños rescatados junto a su entrenador de fútbol de una cueva inundada en el norte de Tailandia, 11 se ordenaron como novicios de Buda.
El niño restante asistió a la ceremonia como espectador, pero no fue ordenado porque es cristiano.
Mientras que el entrenador, Ekapol Chanthawong, fue ordenado como monje, pues este pasó el noviciado cuando era niño.
En la sencilla ceremonia, realizada en el monasterio budista Wat Pha That Doi Wao, uno de los templos más grandes de la provincia de Chiang Rai, los niños aparecieron con la tradicional túnica budista y la cabeza totalmente rapada.
Ahora, los niños deberán pasar nueve días en el monasterio de la provincia de Chiang Rai como novatos.