Escuela Presbiteriana Emanuel de la ciudad de San Antonio, donde habría sido abusado el menor de 8 años.
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Pastor acusado de abuso sexual tuvo “bendición” de Lugo

El pastor Josías Cabral, imputado por posible abuso sexual a un menor de ocho años, en la escuela Presbiteriana Emanuel de la ciudad de San Antonio, ya se encuentra privado de su libertad. El seudoreligioso tuvo la “bendición” del exobispo Fernando Lugo para trabajar en la “evangelización”. Cuando fue presidente firmó el Decreto Nº 4.333 (2010) que aprobaba los estatutos sociales de la “Misión Presbiteriana Emanuel del Paraguay”.

Josías Cabral, pastor de la iglesia Presbiteriana Emanuel, imputado por supuesto abuso sexual
Josías Cabral, pastor de la iglesia Presbiteriana Emanuel, imputado por supuesto abuso sexual

SAN ANTONIO, Dpto. Central. (Por Cirilo Ibarra).- En el mes de diciembre pasado, nuestro diario advirtió sobre la sospecha que genera el desenvolvimiento de la “Escuela Presbiteriana Emanuel” de ésta ciudad. Ocurre que su verdadero fin era oscuro para muchos, porque pese a que sus estatutos sociales enfatizan que se trata de una “organización sin fines de lucro” y que su misión es “proclamar ante toda persona a Jesucristo”, pero nada de eso cumplía.

Hace unos días, la referida escuela pasó a convertirse en noticia, no precisamente por sus actividades educativas, sino por el posible hecho de abuso sexual a un menor de ocho años, en esa institución. El denunciado fue al pastor de la iglesia Presbiteriana Enmanuel, Josías Cabral.

El mismo, de inmediato fue imputado por la fiscala María José Pérez y pidió su prisión. El jueves ya fue detenido el presunto abusador.

Según referencia de la Fiscalía, la expectativa de pena es de tres años de cárcel, información que indignó a la comunidad y fue muy criticado el hecho.

El acta de imputación es tramitada en el Juzgado Penal de Garantías 2, de Lambaré y la Fiscalía tiene un plazo de seis meses para investigar la causa. Al tratarse de un hecho grave contra un menor de edad, la fiscal Pérez solicitó la prisión preventiva de Cabral. “Es un caso grave porque él está en contacto con niños”, sostuvo la agente del Ministerio Público.

Agregó la imputación se basa en el relato de los padres, más una denuncia de la Codeni de San Antonio y un informe clínico forense del Ministerio Público, revelan fuertes indicios de que el niño efectivamente resultó víctima.

La referida escuela fue creada “de común acuerdo” con Fernando Lugo, porque el actual director general, Roberto Carlos Libardi, quien se presentó como pastor de la Iglesia Presbiteriana, llegó desde el Brasil y contactó con entonces presidente de la República (2010).

Logró que el exobispo en tiempo récord firme el Decreto Nº 4.333, aprueba los estatutos sociales de la “Misión Presbiteriana Emanuel del Paraguay”. La escribana Blanca Elizabeth Meza, de Fernando de la Mora, certificó el acta de fundación y su estatuto.

DOS PAREJAS FUERON ENCARGADAS

El documento firmado por Fernando Lugo, en el 2010, remarcó que “el Decreto no implica su registro como culto religioso”. Sin embargo, de manera acelerada construyó un templo en esta ciudad, donde se celebran diversos cultos encabezados por el “reverendo” Roberto Carlos Libardi.

Igualmente en la constitución y en los estatutos aprobados por Decreto, aparecen dos parejas como encargadas de la organización: Roberto Carlos Libardi, su esposa Florinda Agüero de Libardi, Josías Cabral Zárate y su esposa Lidia Ramona de Cabral.

Cuando inició sus actividades fue aplaudida, porque se instaló en un zona de gente muy humilde (barrio El Pueblo) y anunciando que abre sus puertas para servir a los más necesitados.

En el año 2012 ya abrió la “Escuela Presbiteriana Emanuel” y según la denuncia, fue creada al solo efecto de recaudar. Hasta se sospechó de sus actos fraudulentos. Asimismo se acusa al expresidente Fernando Lugo de su posible complicidad, por haber facilitado la creación de la institución, porque fue quien firmó el Decreto que autoriza el funcionamiento como persona jurídica de la “Misión Presbiteriana Emanuel del Paraguay”.

“EXPLOTACIÓN” A LOS PADRES

La escuela se caracterizó por la “explotación” a los padres de alumnos. A las cuotas altas establecidas, continuamente organiza actividades para las cuales solicita aportes en efectivos o alimentos en donación para vender.

Este año las cuotas mensuales que cobra a los alumnos oscilan entre 130.000 hasta 200.000 guaraníes, según denuncia de los padres de alumnos.

En el 2015, apenas se cerró el año lectivo ya pidieron que se vuelvan a inscribir a los alumnos, lanzando promociones, que si se inscriben en diciembre tendrán importantes descuentos. El verdadero fin de aquella promoción habría sido la recaudación a como dé lugar, para las vacaciones de la pareja brasileña en algún lugar del mundo.

La escuela se inició en un precario local y cada año incrementa su construcción, gracias a los aportes que no son voluntarios, sino exigidos. Para muchos, los responsables de la institución se manejan con actos fraudulentos, a costa del perjuicio a la comunidad. E incurriría además en la vulneración de norma tributaria, con el cuento de que se trata de una entidad (religiosa), sin fines de lucro.

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