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El brasileño Jarvis Chimenes Pavão, considerado como un pez gordo del tráfico de droga, purgó condena por lavado de dinero en nuestro país y finalmente fue extraditado ayer al Brasil donde deberá cumplir una condena de 17 años por los delitos de narcotráfico y asociación criminal. Según los datos, el peligroso criminal fue llevado directamente hasta Brasilia, donde será presentado ante un juez federal. Luego sería remitido a una prisión de alta seguridad en Río Grande del Norte.
ASUNCIÓN.- Tras muchas idas y vueltas, finalmente Jarvis Chimenes Pavão partió ayer del Grupo Aerotáctico con destino a Brasil, donde debe cumplir una condena de 17 años por narcotráfico. Un avión de la Policía Federal del vecino país trasladó al supuesto narcotraficante.
La aeronave brasileña despegó a las 08:32 desde el aeropuerto militar, hasta donde Pavão fue trasladado bajo un fuerte dispositivo de seguridad, alrededor de las 06:00, desde la Agrupación Especializada.
Los agentes de la Fiscalía, Senad y de la Policía Nacional se encargaron de los trámites de rigor para entregar al narcotraficante a las autoridades del Brasil.
Los abogados defensores no tuvieron acceso ni comunicación con el recluso, por lo que el abogado Adrián Brizuela resaltó que realizaron varios pedidos de auxilio, ya que existían distintas amenazas de muerte contra Pavão. Insistieron que se faltó a las premisas de la Constitución Nacional, que defiende en primer lugar el derecho a la vida.
El profesional indicó que la doctora Laura Casuso viajó ayer al Brasil para continuar con su defensa. Además, refirió que desconoce a qué penitenciaría brasileña será derivado el criminal.
Por su parte, el ministro del Interior, Lorenzo Lezcano, destacó la actuación de la Policía Nacional y su operativo preventivo, que se puso en práctica durante los tres últimos meses de estadía del capo narco en Paraguay.
Según los datos, Chimenes Pavão, en su país es requerido por el Juzgado de la Vara Criminal de la comarca de Camboriú, estado de Santa Catarina. La extradición fue concedida en 2010 y ahora le esperan 17 años y 8 meses más de encierro por lavado de dinero, tráfico de drogas y asociación criminal, hechos punibles asociados al narcotráfico.
DIRECTAMENTE A BRASILIA
Los datos revelan que Chimenes Pavão fue llevado desde el Grupo Aerotáctico de Luque con destino a Brasilia, capital de Brasil. En este lugar será presentado ante un juez federal y luego, agentes de la Policía Federal lo estarían trasladando inmediatamente a una prisión federal de máxima seguridad en el estado de Río Grande del Norte.
La prisión se encuentra al este de Brasil, a más de 3.500 kilómetros de Santa Catarina, y a 3.000 de Río Grande del Sur, donde se tramitan las principales causas por narcotráfico en su contra.
Afirman que el motivo de llevarlo tan lejos, es por las medidas de seguridad, para tenerlo literalmente aislado, sobre todo del área de influencia de cualquiera de las organizaciones criminales que intentarían rescatarlo o asesinarlo.
También señalaron que cada vez que sea requerido por la justicia será trasladado vía aérea, ya que cuentan con los medios disponibles y así evitar cualquier contratiempo.
