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ASUNCIÓN. El crecimiento del número de casos de robos y hurtos está proyectando problemas en comisarías de Asunción y Central. Los calabozos de estas sedes policiales ya no abastecen para albergar a detenidos.
“En una sola celda están 10 detenidos, el espacio es pequeño, tienen que dormir por turnos. Es una situación lamentable en el que nosotros no podemos hacer nada, porque no podemos derivarles a las penitenciarías porque el ministerio de Justicia no define los traslados”, expresó el comisario Carlos López, titular de la comisaría 3a Metro.
La autoridad policial explicó que los aprehendidos no pueden ser trasladados a centros penitenciarios, porque el ministerio de Justicia, el que tiene competencia en el tema, no toma ninguna resolución.
“Nosotros hacemos nuestro trabajo y lo vamos a seguir haciendo, pero hasta ahora no hay una solución al problema que tenemos”, disparó.
Según la fiscal Teresa Sosa, el incremento de robos, hurtos y violencia familiar se verificaron de manera sustancial.
