ROMA.- En una gigantesca operación de la que participaron 43 equipos de rescate, más de 5.000 inmigrantes ilegales fueron salvados en la madrugada de ayer, de las aguas del mediterráneo cuando intentaban llegar a Italia procedentes de Libia.
De acuerdo a las primeras informaciones, los muertos serían entre 22 y 23 y todos viajaban en precarias embarcaciones de goma de las que fueron rescatadas 209 personas por la nave Acquarius, de Médicos Sin Frontera (MSF), reporta Télam.
De acuerdo a esas informaciones, el Acquarius, con los inmigrantes a salvo a bordo, llegará esta noche al puerto siciliano de Trapani, donde continuarán las curaciones y ayuda a los náufragos, informó en un comunicado MSF, que agregó que varios sobrevivientes “están aún muy traumatizados tras haber pasado varias horas a bordo” con los cadáveres.
Entre los rescatados, informó MSF, hay dos mujeres embarazadas y 50 niños, 45 de ellos sin compañía de un mayor a bordo.
Respecto al resto, la mayoría de los inmigrantes se encontraban en botes neumáticos, aunque los traficantes libios de seres humanos también utilizaron tres embarcaciones de madera.
“Cuando alcanzaron nuestra embarcación, empezaron a trepar y a pelearse” para ser los primeros en subir, explicó Sebastián Stein, responsable de operaciones a bordo del barco Bourbon Argos, también de MSF.