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ASUNCIÓN. La fecha y el lugar de la gran final de la Copa Libertadores vuelven a estar en el centro de la polémica solo un año después de que tuviera que trasladarse el partido de vuelta de la final de 2018 a Madrid, tras los incidentes en El Monumental. Durante una reunión, a realizarse hoy a las 14.30 en la sede de la Conmebol, en Luque, se tendrá la resolución definitiva al respecto.

En un principio, la final de esta edición de 2019 que protagonizarán River Plate, vigente campeón, y Flamengo estaba prevista para el sábado día 23 de noviembre en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, pero los graves disturbios y la complicada situación sociopolítica han hecho que Conmebol se plantee un cambio de sede.

Pese a que el máximo organismo del fútbol sudamericano aseguró mediante un comunicado emitido el pasado 20 de octubre que ratificaba a Santiago de Chile como sede de la final, en la últimas horas ha tomado mucha fuerza el rumor de que la final se trasladará a otro lugar e, incluso, otro día hasta el punto de que la propia Conmebol anunció una reunión este 5 de noviembre con dirigentes de las asociaciones de fútbol de Argentina, Brasil y Chile.

Pese a que son solo rumores, algunos de ellos ya apuntan a que se puede retrasar una semana la disputa de la final, jugándose en este caso el día 30 de noviembre, y la propia capital paraguaya, Montevideo o Lima. Eso sí, en ningún caso se quiere volver a optar por trasladar la gran final Europa.

De esta forma, volvería a entrar en conflicto la decisión de Conmebol con el interés de miles de hinchas que ya compraron sus billetes, tanto para el viaje Santiago como para el estadio, pero la delicada situación de Chile, que esta misma noche además sufrió un sismo, parece obligar al cambio de sede.