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ASUNCIÓN.- El viernes, el ministro de Educación y Ciencias, Enrique Riera, sorprendió a los periodistas apostados en Mburuvicha Róga, cuando se bajó de un taxi para ingresar a la reunión que el presidente Horacio Cartes mantuvo con su gabinete.
Aunque inmediatamente surgieron varios rumores del por qué el secretario de Estado tuvo que recurrir a este tipo de transporte, lo cierto es que en un sencillo acto, lo que hizo fue dar un ejemplo de humildad. Es obvio que tuvo algún problema con el vehículo oficial del MEC y en lugar de exigir otro rodado, sin ningún problema tomó un taxi como un ciudadano común.
Esto nos hace recordar, allá por los 90, cuando el liberal Evelio Fernández Gadea era presidente del Senado y el Legislativo, y acudía todos los días al Parlamento manejando su pequeño y desvencijado escarabajo. Puede que parezca algo fútil pero ante tanta ostentación a la que nos tienen acostumbrados nuestros políticos, estos ejemplos, pocos pero contundentes, hacen bien.
