BRASILIA – La ahora ex mandataria del vecino país tiene unos días de tiempo para abandonar la residencia presidencial.
Dilma Rousseff, presidente destituida del Brasil, debe abandonar el Palacio da Alvorada y volver a vivir en Su departamento que está ubicado en el barrio Tristeza, de la ciudad de Porto Alegre, estado de Río Grande del Sur.
Rousseff, habría planeado escribir un libro luego de ser alejada del cargo presidencial, opción que no se daría finalmente, ya que la misma inesperadamente no fue inhabilitada a funciones políticas y publicas,
por lo cual se espera que la misma compita por algún lugar en las siguientes elecciones (menos presidencial, ya que la ley la bloque para esa opción).
“Ellos piensan que nos vencieron, pero están engañados. Sé que todos vamos a luchar, tendremos contra ellos la más firme, incansable y enérgica oposición que un gobierno golpista puede sufrir”, habría expresado la líder del Partido de los Trabajadores.