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LUQUE.- Aparecía como un partido complicado para ambos. Por las necesidades de cada uno que coinciden en que no pueden perder puntos, porque en cualquier momento pueden caer a la zona de descenso. Pero en esta lucha crucial, la visita se plantó firme en la cancha, manejó el partido a lo largo de casi todo su desarrollo, sobre todo en el segundo tiempo, después de la expulsión de Palacios.
Es que los de la Curva Romero no pudieron descifrar el partido, pese a jugar en su cancha y con las ventajas propias de esa condición. El triunfo contribuye para que el equipo crezca en la tabla de posiciones y que aunque muchos no lo crean, está allí, por ahora, apenas a dos puntos del líder, una posición que no conocía desde 1964.
La superioridad luqueña se patentizó en el primer tiempo cuando Diego Godoy cambió penal por gol, y adelantó a su equipo. Hubo justicia, porque no podían Ovelar ni Aguilar desequilibrar en ataque. Coste que había un buen trabajo en el mediocampo, con Hobecker multiplicándose y creando las pocas oportunidades que no supieron aprovechar.
La entrada de Viera, en reemplazo de Rojas, hizo que el trabajo de mediocampo de Rubio se acrecentara y a partir de allí nació la gran jugada que con una exquisita definición de Gustavo Velázquez, puso el segundo para Rubio Ñu, que desde allí en adelante, ya con el rival disminuido por la expulsión de Palacios, se le hizo fácil sostener el resultado y obtener los puntos en juego.
En la próxima jornada, General Díaz visitará a Olimpia. Mientras que Rubio Ñu recibirá a Cerro Porteño.
