Artículos relacionados

ASUNCIÓN. El Ministerio de Salud Pública recomendó emplear toallas de papel antes que secamanos eléctrico en puntos de acceso a cualquier local y recordó que el termómetro infrarrojo “no quema el cerebro”, como se “alertó” en redes sociales.

“El secador de manos eléctrico no es recomendable utilizarlo. Estos dispositivos dispersan cantidades alarmantes de bacterias de las manos sobre superficies y en el aire dentro de un ambiente donde puedan existir personas enfermas”, advirtió sobre el particular la doctora Viviana de Egea, directora de Vigilancia de Enfermedades Transmisibles.

Incluso, la profesional citó que esas conclusiones fueron refrendadas por estudios de la Universidad de Leeds, Reino Unido, del Hospital Saint-Antoine de París, Francia, y de la Universidad de Udine, Italia. Además, una universidad de Londres, Inglaterra, determinó que los secadores eléctricos de manos “duplican el número de bacterias de las manos durante el proceso de secado”.

EL “QUEMA DEL CEREBRO”

Otro mito difundido hasta el hartazgo en redes sociales también fue abordado por Egea. Se trata de la “información” de que la persona a la que se le somete a toma de temperatura corporal mediante termómetro infrarrojo “sufre quema del cerebro”.

Añadió que esta “revelación” no solo carece de veracidad, sino que es una verdadera tomadura de pelo dirigida hacia los incautos o personas poco informadas.

“Tradicionalmente se empleaban los termómetros de contacto, los de mercurio. Pero, algunas enfermedades podrían transmitirse por contacto, por presencia de bacterias en estos termómetros si no se los higieniza correctamente. A raíz de esto, comenzó a surgir la medición de temperatura sin contacto, que se llevan a cabo con los termómetros de medición infrarroja”, explicó finalmente.