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Olimpia derrotó justicieramente a Capiatá, por 2-0, y se acerca a la punta. Si le gana a Luqueño el miércoles próximo llegará al clásico como líder, igualando el puntaje de Libertad. Julián Benítez y Brian Montenegro, ambos en el segundo tiempo, anotaron los goles que le dieron la victoria al conjunto olimpista.
ASUNCIÓN.- Era un partido esperado, por las diferentes vicisitudes que se vivieron a lo largo de estos últimos 4 años, desde que en 2013 comenzaron enfrentarse en la División de Honor. Y la verdad sea dicha, no fallaron los que pronosticaban un partido intenso, lleno incidencias interesantes y de incidentes inesperados. Estos últimos, felizmente, no aparecieron, pero se mantuvieron latentes por aquello de Irrazábal, tan conocido.
El primer tiempo conoció dos realidades diferentes; la primera, que duró unos 30 minutos, fue la tenencia de la pelota y la búsqueda del gol por medio de los capiateños, especialmente por la tarea de Irrazábal y de Ledesma, conectándose frecuentemente con Gamarra, en la búsqueda del gol. La necesidad de tener más peso, hizo que Diego Gavilán prescindiera del joven Marabel y recurriera a Cristian López para potenciar la ofensiva.
En ese lapso, la visita hizo su mejor papel, pero poco a poco se fue haciendo sentir el peso de las infidelidades, especialmente Santa Cruz cuya actuación fue gravitante para encabezar las mejores opciones del decano que no tuvieron el éxito que se esperaba, Sin embargo quedó latente, al final del primer tiempo, que el que más cerca estaba del gol era Olimpia.
Apenas comenzado el segundo tiempo, una serie de toques fue aprovechado por Julián Benítez para romper el cero cuando apenas habían transcurrido 2 minutos del complemente. La obra, brillantemente rematada, fue creación de Roque, hasta ese momento, la figura de la cancha.
Y cuando 10 minutos después otra buena carga olimpista fructificó en los pies del siempre oportuno (por algo es goleador) Brian Montenegro, aprovecho su momento y anotó el segundo, para poner justicia en el marcador y pisar con fuerza la cancha a partir de ese momento.
A Gavilán se le nubló la película y comenzó a maquinar qué hacer con el partido pues se le escapaba. Lo llamó a Blas Díaz y se fue Alexis González que estaba haciendo su tarea a la perfección, pero el equipo necesitaba un volante más ofensivo que González y que se conectara mejor con Cristian López. Este, precisamente, tuvo la mejor ocasión pero produjo también la máxima atajada de Barreto, en el partido.
Mauro caballero se percató que Roque estaba ya muy cansado y lo mandó a la cancha al “Queso” Fernández, provocando una gran evasión y cantos de saludo afectuoso para Roque, que cumplió un gran papel.
Crecía el fútbol de Capiatá, pero no había señales de peligro. Cristian Riveros fue reemplazado por Rodrigo Burgos para dejar descansar algo más al volante ya que a la vista, miércoles y domingo próximos, hay dos encuentros importantes: contra Luqueño primero, y el Clásico después.
Buen triunfo de Olimpia que lo pone a tiro de la punta ya que ganándole a Luqueño, puede llagar al clásico compartiendo la punta con Libertad.
DETALLES DE LA JORNADA
Cancha: estadio Manuel Ferreira. Árbitro: Antonio Arias. Goles: ST 8’ Julián Benítez, 12’ Brian Montenegro (O). Amonestados: Julio Irrazábal, Jorge Paredes, Cristian Martínez. (DC).
OLIMPIA: Diego Barreto; Rodi Ferreira, José Cañete, Hernán Pellerano y Fernando Giménez; Jorge Mendoza, Cristian Riveros (Rodrigo Burgos), Richard Ortiz y Julián Benítez (Cesar Benítez); Brian Montenegro y Roque Santa Cruz (Fernando Fernández). DT: Mauro Caballero.
DEPORTIVO CAPIATÁ: Bernardo Medina; Carlos Bonet, Jorge Paredes, Néstor González y Ramón Ortigoza (Dionicio “Loco” Pérez); Junior Marabel (Cristian López), Eduardo Ledesma, Alexis González (Blas Díaz), Cristian Martínez y Julio Irrazábal; Roberto “Toto” Gamarra (Dionicio “Loco” Pérez). DT: Diego Gavilán.
