Inicio / La visión de ADN / Últimos pataleos

Últimos pataleos

En compañía de su candidato a la presidencia de la República, Efraín Alegre, el titular del Senado, Fernando Lugo, anunció ayer en rueda de prensa realizada en la sede del Congreso que no acatará lo dispuesto por la Corte Suprema de Justicia en lo que respecta a la habilitación de Horacio Cartes, Nicanor Duarte Frutos y Juan Afara para pugnar por una banca en la Cámara Alta. Tales declaraciones podrían tomarse en serio, en cuyo caso deberíamos alertarnos por tan grosero atropello al Estado de Derecho y a la democracia misma, pues dichos personajes están avisando que desconocerán el dictado de la voluntad popular,  o bien, como una maniobra desesperada de la oposición para intentar ganar algunos puntos en la intención de voto, a solo 10 días de unas elecciones que, a juzgar por los sondeos, se perfilan como la peor de toda su historia.

La rueda de prensa en cuestión es censurable en todos y cada uno de sus aspectos. Desde el lugar en que se realizó, al convertir las oficinas de un poder del Estado en un improvisado “PC” de la alianza opositora, pasando por la pésima organización, hasta los contenidos de las exposiciones. Lo único de positivo que puede rescatarse de ella es que sus protagonistas dejaron al desnudo, una vez más, la brutalidad que los caracteriza; algo a lo que también contribuyeron los periodistas, quienes actuaron con elevado profesionalismo a la hora de formular las preguntas.

En lo que concierne al tema de fondo, resulta caricaturesco que Fernando Lugo, tal vez el único que no debería opinar en contra de lo dispuesto por el máximo tribunal, pues juró como senador y ejerce la presidencia del Poder Legislativo siendo expresidente de la República, se asigne en la actualidad el rol de juez supremo de la nación, resuelva qué es constitucional y qué no, y proclame por adelantado el desconocimiento a la voluntad de los electores.

Pero no es solo Lugo. Lo mismo sostienen el presideciable de la alianza opositora, sus “escuderos” del PDP, con Desirée Masi a la cabeza y quienes les “esponsorean” (patrocinan) desde grandes medios de prensa, como ABC Color y Última Hora. Todos ellos se juegan en esta recta final con miras a los comicios a provocar algún escándalo, aunque sea completamente artificial, para tratar de mejorar los numeros negativos que arrojan todos los estudios de opinión.

El problema de fondo es que estos sectores están dispuestos a respetar el Estado de Derecho y las reglas de juego de la democracia… solo si les resulta favorable a sus intereses. Y si no, al diablo con las normas, con el Poder Judicial, con la Constitución y con lo que fuere, como lo demostraron sobradamente en el caso de la enmienda.

En este tema en particular, ellos mismos promovieron, no una, sino cuatro acciones de inconstitucionalidad ante el único órgano facultado para interpretar la Constitución, la Corte Suprema, a la que ahora desconocen por no expedirse de acuerdo a sus conveniencias. Y por adelantado, dicen que ignorarán también lo que disponga la mayoría de los electores, quienes, como en otras elecciones, se disponen a votar mayoritariamente por la lista de la ANR, encabezada por HC e integrada por Afara y Nicanor, a los que en teoría no permitirían que juren como senadores.

Como dijo ayer el profesor Juan Carlos Mendonca, las posiciones de Lugo y compañía a cualquiera dejan estupefacto. Su aplicación equivaldría a instaurar “la ley de la selva”. Cumplir aquello que me gusta y desacatar lo que no me gusta, imponiéndose finalmente la voluntad del más fuerte.

Todo esto, claro está, en el supuesto de que tomemos en serio tales declaraciones. Pero quienes pretenden poner a la política por encima de la ley y de lo que determinen las instituciones, como en oportunidad de la enmienda, o al impedir que jure Nicanor Duarte Frutos en el 2008, no tienen ninguna chance de hacerlo en el actual contexto, completamente distinto a los registrados en aquellas ocasiones. Y si lo hicieren, se exponen a que unos cuantos miles de colorados los “persuadan” de concretar sus planes.

Sin fuerza política y en el marco de una campaña electoral perdedora, las manifestaciones de Lugo, Efraín y compañía, así como los titulares rimbombantes de sus “sponsor”, hay que tomarlos como lo que son: los últimos pataleos. Solo eso.

Commentarios

comentarios

Mira también

Nunca es tarde

Fue en una conversación casual entre amigos, en estos días calurosos de finde. Por supuesto …