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LONDRES.– Tras dos rondas de votaciones de los diputados conservadores, el Reino Unido tendrá, a partir del 9 de setiembre, una mujer como primera ministra. La investidura se jugará entre Theresa May y Andrea Leadsom. Una de ellas será la encargada de notificar la salida de la UE.
Después de la renuncia de David Cameron a la jefatura del gobierno, un día después del triunfo del Brexit, su sucesora tendrá la responsabilidad de notificar oficialmente la ruptura del país con la Unión Europea (UE). Finalmente, ninguno de los dos tenores tories de la campaña a favor de la salida del Reino unido de la UE sucederá a David Cameron: Boris Johnson (antiguo alcalde de Londres y partidario pro-Brexit) decidió no presentarse cuando Michael Gove (ministro de Justicia) obtuvo sólo 46 votos en la segunda vuelta de la votación.
Los 150.000 miembros del partido conservador van a ahora elegir entre Theresa May y Andrea Leadsom a la futura dueña del partido, que se convertirá en la primera mujer jefe de Gobierno desde Margarita Thatcher, forzada a dejar sus funciones en 1990. Aunque Theresa May consiguió la mayoría de los sufragios, sin embargo no está asegurada de conseguir la victoria final.
La ministra del Interior desde 2010, que se quedó fuera de la guerra interna que socavó el partido conservador durante la campaña del referéndum, se convirtió en la candidata del consenso para encarnar la solución de sustitución.
Andrea Leadsom, una política desconocida que se presenta como heredera de Thatcher. La secretaria de Estado de Energía de 53 años era prácticamente desconocida antes del referéndum. La candidata euroescéptica, que obtuvo su primer mandato de diputada en 2010, fue la revelación de la campana de los pro-Brexit, particularmente debido a intervenciones eficaces durante debates televisados. Ella, que pasó tres décadas en la City de Londres, nunca ha tenido una función importante en el seno del gobierno conservador, lo que limita su notoriedad y legitimidad.
