Los habitantes de la zona de Península, en Alto Paraná, se manifestaron para exigir un mayor control de la ANDE por las irregularidades en el suministro eléctrico de una criptominera ilegal que hoy fue intervenida.
La intervención fue realizada por funcionarios de la ANDE, luego de recibir denuncias sobre una presunta instalación de criptominería en el lugar. Sin embargo, según informes preliminares, los equipos habrían sido trasladados durante la noche anterior al operativo, complicando las acciones de verificación.
En el lugar estuvo presente el ingeniero Crispín Pereira, jefe de Pérdidas de la Región Este, que abarca los departamentos de Alto Paraná y Canindeyú. Su participación fue clave para coordinar las labores de control y supervisar la situación en terreno, en busca de indicios que confirmen la actividad denunciada.
Una de las personas señaladas como presunto responsable de esta operación sería un ciudadano identificado con el apellido Irrazábal, lo que generó indignación en la comunidad local. Vecinos de la zona exigen una investigación exhaustiva para determinar a los involucrados y esclarecer las irregularidades relacionadas con esta actividad.
La criptominería, conocida por su alto consumo de energía, genera preocupación entre los residentes debido a su impacto directo en la calidad del suministro eléctrico. Según los manifestantes, la inestabilidad en el servicio afecta la vida cotidiana y el desarrollo de la comunidad.
Los pobladores iniciaron movilizaciones en demanda de mayor control por parte de las autoridades y la implementación de medidas concretas para garantizar un suministro eléctrico estable y sin conexiones ilícitas. Además, insisten en la necesidad de sanciones ejemplares para quienes resulten responsables de cualquier tipo de irregularidad que comprometa el servicio.
Las autoridades aseguraron que continuarán con las investigaciones para determinar las responsabilidades y tomar acciones que permitan restablecer la confianza de los usuarios en el departamento.