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ASUNCIÓN. La defensa del intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, ejercida por el abogado Guillermo Ferreiro, volvió a recurrir a una nueva chicana para evitar el desarrollo de la audiencia de imposición de medidas para la autoridad municipal, imputado por lesión de confianza en el caso conocido como “Tía Chela”.
“Estoy acá, dejando mi trabajo allá en Ciudad del Este, pero mis abogados decidieron recusar al juez Humberto Otazú por nexos con los Zacarías”, justificó el intendente, aunque no supo responder cuál sería el nexo argumentado. Su defensor se limitó a decir: “vamos a entregar las pruebas después”.
Ferreiro insistió en “la total parcialidad del juez, que ha resuelto diferir la resolución de los incidentes hasta que se resuelva una contienda de competencia”.
ESCRACHE
Por otro lado, una vez más un grupo de personas escrachó al intendente en los pasillos del Tribunal. A diferencia de otras ocasiones, donde el jefe comunal reaccionó violentamente despojando incluso al manifestante de su celular, esta vez simplemente escuchó, aunque estaba visiblemente nervioso.
Prieto y otras 10 personas está imputados por lesión de confianza, por la compra supuestamente fraudulenta de 25.000 kilos de alimentos durante la pandemia en el 2020. Los víveres estaban destinados a personas vulnerables de los barrios.
Aunque en principio el intendente dijo que se sometería a la Justicia, desde el inicio del proceso está chicaneando a través de sus defensores. Esta es la tercera audiencia de imposición de medidas que logra suspender. Incluso llegó a denunciar a los fiscales de la causa, Silvio Corbeta, Rodrigo Estigarribia y Alma Zayas, por persecución de inocente y falseamiento de documentos.
Miguel Prieto tiene otra treintena de denuncias por hechos de corrupción en la Municipalidad de Ciudad del Este.
