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CIUDAD DEL ESTE.- Los casos de abusos sexuales de jugadores juveniles y en especial de chicos de las formativas van en aumento en el Brasil. A través de los distintos medios se realizó un recuento de técnicos acusados por estos crímenes y que quedaron en la impunidad. El diario EL PAIS de Brasil trajo a colación el caso del técnico deportivo José Alzir Flor da Silva, prófugo de Brasil con una condena de 9 años de cárcel por abuso sexual contra jugadores menores de 14 años. Actualmente, Alzir está como gerente de fútbol del club Atlético 3 de Febrero de Ciudad del Este y sigue reclutando adolescentes.
Según la nota realizada por dicho medio, en el mismo año que el ídolo Renato Portaluppi asumió el mando del Gremio por primera vez, el club tricolor protagonizó un escándalo de abuso sexual en las categorías base. A mediados del 2010, José Alzir, que ayudaba a revelar estrellas del fútbol como el reconocido Ronaldinho Gaúcho y coordinaba la base del equipo a más de una década, fue despedido por justa causa luego de ser acusado de molestar a tres jugadores menores de 14 años. Pero a pesar de ser condenado en segunda instancia a nueve años de presión, Alzir Flor se mantiene activo en el mundo del fútbol.
De acuerdo con las declaraciones de las víctimas y testigos de Gremio, José Alzir acostumbraba a ducharse y dormir con los chicos en los alojamientos que albergaba a cerca de 80 jugadores en las instalaciones del antiguo estadio Olímpico. La mayoría de los funcionarios sabían de sus andanzas y ya habían escuchado rumores de los jugadores sobre los abusos. Sin embargo, nunca se había realizado una denuncia formal hasta que una madre decidió romper el silencio y acudió a la justicia.
El País, entró en contacto con Alzir, con quien charló sobre el tema. El dirigente justificó su venida a Paraguay por supuestamente haber perdido mercado en grandes clubes de Brasil luego del escándalo en la base del Gremio.
“Surgieron oportunidades de trabajar en otros países y decidí aprovechar”, dijo y agregó que informó a la dirección del Club 3 de Febrero de Ciudad del Este sobre el proceso que respondía en su país cuando fue contratado en el 2012. “Estoy muy agradecido al club por aceptarme y creer en mí”, expresó el entrenador, quien todavía mantiene la versión que mantuvo en los tribunales. Se declara inocente y niega que haya abusado de los jugadores del Gremio.
Además dijo que la denuncia fue hecha solo para perjudicarlo. Todo ocurrió a partir de que en una concentración agredió a un muchacho de 13 años, aseveró. Dijo desconocer la orden de prisión, pero que está a disposición de las autoridades brasileñas cuando sea notificado. “Ley es ley, voy a respetar”, acotó.
En nuestro país igualmente se registraron varias denuncias contra entrenadores y dirigentes de fútbol por supuestos abusos sexuales. Muchos de ellos, incluso, fueron procesados y encarcelados.
