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Desde la asunción del nuevo gobierno, las autoridades y funcionarios públicos del distrito de Tomás Romero Pereira sufren una persecución política por parte del actual senador Juan Afara, quien mandó despedir a todos los empleados que no acompañaron su movimiento “Sumando Colorados” en las elecciones del 2018, tal como ocurrió con los trabajadores de Tekoporã, afirmó el intendente Víctor Casas Pinkoski. Lamentó que la ciudad esté padeciendo “una dictadura al estilo venezolano” por parte del senador, quien estaría aprovechando su posición para nombrar a todos sus “protegidos”.
TOMÁS ROMERO PEREIRA, Dpto. de Itapúa.- Casas Pinkoski, explicó que ni bien asumió el nuevo gobierno los cambios comenzaron inmediatamente. La destitución de funcionarios regionales del programa Tekoporã, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social (MDS), se produjo automáticamente.
En la dependencia distrital trabajaban cuatro personas, quienes se encargaban de asistir y guiar a los beneficiarios del plan en la zona. Todos fueron despedidos motivo alguno y sin previo aviso. Los afectados son: Carolina Cantero, Erika Núñez, Yudyd Meza y Egidio Saucedo. En el lugar de los mismos, fue nombrada Marizol Rolón de Núñez como nueva encargada del aporte social en el nordeste de Itapúa.
Rolón de Núñez, sería una de las “íntimas protegidas” del senador Afara en el departamento. La misma enfrenta sumarios por irregularidades y ya había sido trasladada hasta la localidad de Capitán Meza por no desempeñar en forma su trabajo.
Al parecer, el parlamentario no perdona a aquellas personas que acompañaron su movimiento Sumando Colorados en las elecciones del año pasado. “Juan Afara persiguió a los funcionarios. Ni bien asumió ya empezó a despedir a los empleados, persigue por el solo hecho de no haberlo acompañado”, expresó Casas Pinkoski.
Mencionó que la oficina regional de Tekoporã funcionaba en una parte del predio de la Municipalidad, pero que hasta el momento no fue notificado del cierre del mismo y ni siquiera le devolvieron la llave del departamento.
Lamentó que los más afectados sean siempre la gente que está en situación de vulnerabilidad. “Gente inocente que no tiene nada ver. Es una vergüenza que se aproveche de la persona pobre”, manifestó el intendente.
Agregó que la situación que se vive en la zona es “una dictadura al estilo venezolano”. “Afara con su patota es el dictador”, indicó.
Expuso que muchos beneficiarios de Tekoporã son personas con solvencia económica y que tienen afinidad con el senador. “No hay que jugar con la necesidad de la gente; los cargos son circunstanciales. Cuando sos autoridad tenés que estar para todos”, reiteró.
El intendente mencionó que en el pasado ya tuvo problemas con Juan Afara, cuando era gobernador de Itapúa, y que en aquel entonces éste logró expulsarlo del Partido Colorado. Los inconvenientes habrían sido porque el senador no se sentía acompañado y su movimiento siempre perdía en la ciudad.
