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ASUNCIÓN.- De repente, todas las bancadas del Senado tienen mucha prisa en que se realice el juicio político al contralor Enrique García, y, por lo visto, los opositores no tienen problema con que su sucesor sea un colorado. Ahora, la explosiva Desirée Masi terminó siendo la más interesada en los enjuiciamientos, cuando que, durante mucho tiempo, se dijo que ella bloqueaba el del ministro de la Corte Suprema, César Garay.
Todo cambia, eso es indudable. La semana pasada nomás, el presidente del Senado, Silvio Ovelar, había dicho que García podría continuar en su puesto porque había intereses políticos en juego y determinados sectores de la oposición preferían mantenerlo a él, a pesar de las denuncias en su contra, porque en su reemplazo debería asumir el subcontralor, Camilo Benítez, de trayectoria impecable, pero colorado.
Luego de la sesión de la cámara, cuando Juan Carlos Galaverna increpó duramente a Stephan Rasmussen, por haber sido uno de los que defendía esta postura, el patriaqueridista inmediatamente dijo que no dijo lo que dijo y aseguró que su partido no se opondría a que asumiera Benítez aunque, insistió, era preferible que el contralor no fuera del mismo partido que el jefe del Ejecutivo.
Imposible pensar que hay bancadas de la oposición que están manipulando una situación, sin que Masi esté detrás, así que no tenemos ninguna duda de que ella fue una de las que planteó que había que evitar que asumiera un colorado, así como en el caso del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados dijo que había que evitar que pudiera asumir un cartista.
En cuanto al caso del ministro Garay, cuya acusación lleva ya más de 4 años en el Senado, siempre se dijo que Masi era una de las que evitaba su concreción, debido a que el magistrado tenía a su cargo el expediente de Rafael Filizzola, marido de la legisladora, por lo que ella recurría al famoso chantaje para evitar que se realice el juicio oral al exministro del Interior de Fernando Lugo.
Parece que el “tuke” que les dio Galaverna afectó a todos, y ahora resulta que Masi es la más interesada en que se apuren los juicios políticos pendientes, y afirmó que “a mí no me importa que el subcontralor sea colorado o no. Se va a ver, se van a finiquitar esos dos juicios políticos, quieran o no quieran. Ayer por fin se fijó fecha”.
