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ASUNCIÓN. Aunque hay buenas perspectivas económicas para el 2020, esto no se reflejará en grandes cambios para la población en áreas tan sensibles como la salud, educación, infraestructura, etc. debido a la debilidad, que es la característica principal de este gobierno, que muy pronto sufrió la amenaza de un juicio político, según el economista Amílcar Ferreira.
Parece haber coincidencia entre los expertos en que el año próximo será mucho mejor y que lo peor ya ha pasado. “Estamos viendo a partir de julio una recuperación de la economía. 2019 podemos dividir en dos partes, el primer semestre con una desaceleración de la economía. El nivel de ventas de todos los sectores tuvo caídas. A partir de julio empezó una recuperación, leve al inicio pero se fue consolidando. Hoy, de los 8 sectores de consumos, 7 de ellos ya están bien, con valores positivos; va a hacer que la economía termine con un 0,2 de crecimiento, muy diferente a lo que se mostraba en el primer semestre, con la ecomía en caída. Se logró revertir esa situación”, aseguró.
Mencionó como aspectos positivos como el clima, con lluvias normales, lo que permite que mejore la agricultura; la ganadería e infraestructura también están mejor; además que “el comercio fronterizo con Brasil se está recuperando, no así con Argentina. Todo esto anticipa que en el 2020 vamos a tener un crecimiento más o menos del 4%; va a ser un año normal”.
Pero esto no es como para tirar fuegos artificiales, porque no es mucho lo que verá la ciudadanía ya que el gobierno actual se caracteriza por su debilidad. Ferreira dijo que “con el tema del juicio político, perdió mucha fuerza, por acontecimientos que se dieron muy temprano”.
“Yo no creo que se puedan dar grandes cambios debido a esa debilidad. Van a ir administrando el presupuesto público, que es similar cada año; pero grandes iniciativas no creo, por esa debilidad. Es una espada de Damocles que va a estar presente hasta el final de esta administración”, expresó.
