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El gobierno de la Argentina decidió aumentar a 500 dólares la cota de compra libre de impuestos. Cada argentino puede ingresar a su territorio con artículos importados hasta por dicho monto y no pagar los tributos correspondientes. Esto, sin duda, beneficia al turismo de compra en Paraguay, pero las autoridades del vecino país ponen trabas en las zonas fronterizas con los trámites migratorios que desalientan toda actividad turística.
CIUDAD DEL ESTE. Argentina elevará de 300 a 500 dólares la cantidad máxima de compras libres de impuestos que podrán realizar los viajeros que entren al país, informó la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
La agencia tributaria argentina explicó que el límite determinado para los establecimientos libres de impuestos será de 500 dólares o su equivalente en otra divisa, y para los menores de 16 años se fijará en 250, reseñaron funcionarios públicos del país vecino.
La AFIP declaró que esta medida “apunta a equiparar la franquicia libre de impuestos con los valores vigentes en el Mercosur”.
Por otra parte, las compras puerta a puerta realizadas por el Correo Oficial, cuyo valor no supere los 25 dólares, se enviarán a domicilio sin necesidad de completar la declaración jurada de envíos postales, como sí lo requieren las demás compras.
Sin duda estas medidas adoptadas por la Argentina beneficia al turismo de compras de Paraguay, pero a la parte de poner en vigencias normas para que los argentinos puedan compras más artículos importados en el exterior, existen trabas en las regiones de frontera, que desalienta el turismo regional.
La semana pasada, en Encarnación hubo mucha queja debido a las interminables filas en el paso fronterizo. Tuvo que intervenir el canciller nacional, Eladio Loizaga, quien pidió a su colega argentino ver los mecanismos para agilizar el paso de personas y autos.
Pero este problema no es solamente allí. Los turistas argentinos quienes vienen a Ciudad del Este para realizar compras, al retornar a su país encuentran muchos inconvenientes en la aduana de Puerto Iguazú. Los trámites migratorios son lentos. No existe la infraestructura y el personal necesario.
Se forman largas filas de rodados y la queja es generalizada. Las autoridades brasileñas ya presentaron una protesta, pero la respuesta es que no tienen condiciones de habilitar más ventanillas para que se hagan las gestiones, y tampoco personal suficiente.
Sin duda esta es una vieja práctica de la Argentina que, por un lado, adopta medidas para incentivar el turismo, pero por otro lado pone trabas.
Con relación a la nueva cota, comerciantes de Ciudad del Este indicaron que sin duda es una medida saludable, pero que debido a que viene de la Argentina se debe tomar con cuidado. Indicaron que siempre hay sorpresas.
En Puerto Iguazú, casi en la cabecera del Puente Internacional de la Fraternidad (frontera con el Brasil), sobre el río Yguazú, hay un “Dutty Free”, donde se venden productos importados libre de tributos. Los argentinos pueden ir allí a realizar sus compras hasta por 500 dólares libre de impuestos.
