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SANTIAGO DE CHILE.- La presidente chilena Michelle Bachelet se presentó en calidad de “testigo voluntario” en el marco de la investigación por el caso Caval, el cual involucra a su hijo mayor, Sebastián Dávalos, y la esposa de éste Natalia Compagnon, en la corrupción asociada a la compra y venta de terrenos en la zona central de Chile. “Estuvo 45 minutos frente al fiscal que lleva la causa”, informó el ministro del Interior, Jorge Burgos.
La mandataria no aparece vinculada en la causa, pero su nuera fue imputada por delitos tributarios a fines de enero, mientras que su hijo sigue bajo investigación.
Este escándalo, que estalló en febrero de 2015, golpeó fuerte la imagen de la mandataria socialista, cuyo apoyo popular cayó en picada y los analistas afirman que será muy difícil que se pueda reponer.
La revelación sobre la declaración de Bachelet ante el fiscal, se produce luego de que la revista “Que Pasa” publicó en su sitio web el jueves por la noche una supuesta conversación telefónica de uno de los implicados en el caso Caval que involucraba directamente a la presidente en este escándalo.
Antes de abordar un avión que la trasladó al sur de Chile y luego de conocer la publicación, Bachelet la calificó de “infamia” y “canallada”.
“Quiero hacer una declaración respecto a una información que ha salido en los medios nacionales hoy día, que me involucran, o sea, que aparece mencionado mi nombre”, comentó Bachelet a periodistas.
“Quiero, primero que nada, decir que desmiento tajantemente, categóricamente esa información. Creo que es una canallada, que es una infamia, y que, además, no descarto un montaje”, agregó.
La publicación de Qué Pasa, la misma que destapó hace un año el caso Caval, alcanzó a estar algunos minutos en su sitio web, antes de ser retirada.
