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El fútbol ¿es una fiesta? Y sí… y no…creemos que a pesar de todos los incidentes habidos y por haber, no hay fiesta deportiva más grande que la del fútbol. Pero lamentablemente, y hay que decirlo, de tanto en tanto surge algún escandaletes tamaño familiar para conmover las más profundas convicciones. Esto que pasó el domingo en Sajonia, merece ser tenido en cuenta y adoptar las medidas correctivas para que no se vuelvan a repetir.
ASUNCIÓN.- El árbitro estuvo desacertado, según coinciden todos los observadores imparciales. Fue el factor desencadenante de la trifulca generalizada al término del encuentro. No supo conducir el encuentro por los cauces normales y tuvo la desgracia de dos asistentes incompetentes. Y aquí nos viene a la mente un refrán: “La culpa no es del chancho, sino del que le da de comer”.
Y claro, Juan José Zapag denostó contra la APF, contra el Departamento de Árbitros, contra Amelio Andino y contra Óscar Velázquez. Piden más o menos el paredón para estos últimos y a la APF se le retiró la confianza.
INCITACIÓN A LA VIOLENCIA
Hay que saber muy bien de quien fue la idea del agresivo cartel ubicado en la gradería Sur que aludía a la filiación de Raúl Zapag, hermano natural del actual presidente. Entonces, después de haber sido víctimas del árbitro, encontrarse con tamaña injuria, desató la ira del candidato presidencial. Primero en el campo de juego contra los soplapitos y después en la zona de vestuarios contra Marcos Trovato.
El presidente de Olimpia, según testigos presentes en el pasillo hacia los camarines, le gritó a Raúl las mismas palabras que el cartel agraviante. Y Zapag dio un salto de tigre para acercarse a Trovato a quien desafió abiertamente.
REACCIÓN OFICIAL
Todo esto derivó en la presentación de una nota, como lo anunciábamos ayer, en la que el Club Cerro Porteño pide, entre otras cosas, lo siguiente: solicitó que se le adjudiquen los puntos del clásico, algo que no va a ocurrir. Al mismo tiempo, solicitó la destitución de Amelio Andino, director de la Comisión de Árbitros de la Asociación Paraguaya de Fútbol, y de la terna que dirigió el clásico, cosa que pasará al Tribunal Disciplinario.
Para el trío arbitral piden la pena máxima que es de dos años de suspensión. De igual manera solicitan se le libere de la tarjeta roja directa al futbolista, Víctor Cáceres, aduciendo una injusta decisión. Esto tampoco será concedido. No hay antecedentes que respalden la petición.
La nota fue entregada en las oficinas de la APF alrededor del mediodía de ayer por el abogado Juan José Bestard y el Lic. Juan Casasnovas, secretario general del club. La firmó el presidente, Juan José Zapag. Los cerristas recordaron que el asistente, Eduardo Cardozo fue aquel que anuló el gol legítimo del Deportivo Santaní en el 2015, frente a Olimpia, y que le hubiera dado el campeonato a Cerro Porteño.
VERSIÓN DE LA APF
Tres veedores de la APF, Pedro Vázquez, Raúl Ibáñez y Bernardino Caballero, presentaron un informe en el cual detallan todo lo acontecido. Recogen las palabras y los testimonios, incluidos videos, de los incidentes. A raíz de esto pueden resultar sancionados el presidente de Olimpia, a quien se le oyó pronunciar la frase “Bastardos sin gloria”, la misma del cartel comentado, y a Raúl Zapag por haber intentado agredir al árbitro y los desmanes que causó y de los cuales dice no estar arrepentido.
