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Cuando el oficialismo colorado y sus aliados decidan tratar el proyecto de enmienda, lo que harán será solicitar a la Comisión Permanente la convocatoria a sesión extra del Senado. No se sacarán tanques de guerra a la calle ni se pretende ningún golpe contra el Congreso, así que el circo que montan disidentes y opositores es solo eso, circo.
ASUNCIÓN.- Parece que Eduardo Petta se mudó a vivir a su oficina del Senado. Nadie sabe el verdadero motivo aunque su excusa es que así permanece en alerta por si al oficialismo se le ocurre aprovechar la madrugada para dar entrada a su proyecto de enmienda, como si no pudiera hacerlo en horas de oficina, vaya a saber por qué.
Así de absurda es la actitud de disidentes y opositores que durante toda la semana pretendieron mantener en jaque a la ciudadanía, con historias de golpes y autogolpes como si estuviéramos a un paso de una guerra civil.
El más histérico de todos es Petta, quien ayer se mantuvo otra vez firme y en guardia, como si en realidad se pensara en atacar por la fuerza el Congreso, él y su “gran” humanidad podrían impedirlo haciendo frente al mismo demonio.
En una conferencia de prensa dijo que tenían versiones de que se aprestaba la presentación del pedido de sesión extra a la Comisión Permanente, y advirtió que “cuidado, que no es solo como se dice, que es el Frente Guasu. Esta es una convocatoria de tres sectores: el Frente Guasu, el llanismo liberal y el oficialismo colorado cartista. También van a ejercer derecho a la manifestación los sectores que defienden la Constitución, y la responsabilidad en cuanto al orden público es de exclusiva responsabilidad del presidente de la República, a través del Ministerio del Interior”.
La Constitución Nacional tiene muy claro el procedimiento a seguir en el supuesto caso de que durante el receso parlamentario, una cuarta parte del Senado o de Diputados quiere tratar un tema; debe presentar una solicitud a la Comisión Permanente, la cual tendrá que convocar a la sesión de la cámara respectiva en un plazo no mayor a 48 horas. Y es precisamente esto lo que pretende hacer el oficialismo una vez tenga listo el proyecto de enmienda.
En realidad, los únicos que plantean quebrar el orden constitucional son justamente ellos, disidentes y opositores, que aseguran que no obedecerán la disposición que obliga a convocar a la sesión extra.
